Una mujer de 55 años residente en Almería podrá acceder a una herencia valorada en aproximadamente 500.000 euros tras demostrar en los tribunales que es hija de un médico fallecido a mediados de los años ochenta. El profesional había dejado su patrimonio repartido entre sus tres hijos reconocidos.
El abogado de la mujer, Fernando Osuna, explicó que durante el juicio se acreditó que su padre biológico era un vecino, médico de Granada, quien mantuvo una relación con su madre a finales de los años sesenta, cuando ella estaba casada con otro hombre.
La relación entre ambos se desarrolló en las provincias de Granada, Almería y Murcia, en una época en la que no existía la posibilidad legal de divorciarse. Además, la legislación vigente consideraba delito el adulterio, lo que podía haber acarreado penas de prisión para el médico.
Intentó acercarse a sus hermanos sin éxito
La mujer intentó en varias ocasiones acercarse a sus hermanos reconocidos, pero ante la negativa de estos decidió presentar una demanda de paternidad. Junto a la demanda, aportó pruebas que acreditaban la relación entre su madre y el médico.
Tras la presentación de las pruebas, los hermanos aceptaron realizarse un test de ADN, que confirmó con un 99,999 % de certeza que compartían el mismo padre. Durante el proceso también se recordó que el médico mantuvo una relación cercana con la mujer durante su infancia, hasta su fallecimiento cuando ella tenía 15 años.
Con la resolución favorable de la demanda, la mujer podrá acceder a la herencia de su padre. Actualmente se encuentra en proceso de negociación con sus hermanos biológicos para la distribución del patrimonio.