El Mirador de San Miguel Alto ofrece una de las vistas más bellas de Granada. Desde allí, se contempla la Alhambra presidiendo la ciudad. Es uno de esos rincones que muchos visitantes pasan por alto pero que merecen la pena. La ermita y el entorno cuentan con mucha historia. Concretamente, la Muralla Nazarí no es tan antigua como otras fortificaciones del entorno, pero antiquísima igualmente, del siglo XIV.
El pasado verano, las administraciones dedicaron medio millón de euros a trabajos de limpieza y conservación. Sin embargo, poco después de tener lugar este arreglo, un graffitero dejó su marca sobre un conjunto monumental protegido. Fue un usuario en la red social Facebook el que alertaba de esto.
Está por ver cuánto cuesta el arreglo y si se puede intervenir sobre la piedra histórica sin dañarla.
https://www.facebook.com/e.dlweiss/posts/10218825671186928
Comentarios