El pasado 1 de mayo, primer día de la Feria de Sevilla, un caballo caía desplomado y moría en la avenida Flota de Indias. El veterinario que lo examinó tras su muerte, certificaba que la causa de dicha muerte era una hemorragia interna en el corazón, debido a la rotura de un vaso coronario en el corazón.
El partido sevillano PORTODOS presentó escritos denunciando el caso y ha conseguido los registros de control llevados por el servicio de vigilancia para el control de acceso de carruajes al recinto ferial y han descubierto que, para este caballo, hay dos registros de entrada consecutivos por distintos puntos con un intervalo de algo más de una hora entre ellos y ningún registro de salida en medio.
"El carruaje salió por algún lugar no habilitado y, por tanto, no controlado. Es evidente que el conductor del carruaje quería eludir el control de salida. ¿Qué pasó en esa salida eludiendo los controles adrede? ¿Dónde llevaron al caballo durante ese tiempo? ¿No es mucha casualidad que despues de una salida cuyo control el conductor evitó el caballo muriese?, se pregunta el partido en un comunicado.
"Hemos consultado veterinarios expertos en equinos y su opinión es que la rotura de un vaso coronario del corazón ha sido provocada, casi con total seguridad, por un sobreesfuerzo (o sea, que el caballo fue presuntamente reventado). Dudamos que sea la primera vez que esto ocurre (con éste y con otros carruajes). Por lo tanto, el partido presentará una denuncia contra el conductor de este carruaje; exigiremos toda la información de entradas y salidas de de la feria y denunciaremos asimismo todas las demás irregularidades que encontremos", zanajn en la nota de prensa.
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