La foto de Juan Carlos Toro que acompaña esta publicación representa de manera extraordinaria la otra cara de la tractorada. Partiendo de la base de que la mayoría está de acuerdo con las reivindicaciones de los agricultores, el malestar de muchos llega por la poca flexibilidad de los manifestantes a la hora de permitir algún acceso en las zonas bloqueadas por los tractores.
En la imagen, captada este miércoles a primera hora, se puede ver a una mujer fuera de su vehículo con rostro de desesperación e impotencia ante el colapso. Unas sensaciones compartidas por miles de conductores durante la primera jornada de manifestaciones no autorizadas de los agricultores y desde bien temprano en esta jornada de miércoles.
Detrás de esta mujer y de los conductores afectados se encuentra la rutina perdida o situaciones extraordinarias que quedan anuladas en el interior de un vehículo durante horas de espera.
Ese otro lado de la tractorada está dejando a muchos trabajadores sin poder llegar a su punto de trabajo, a estudiantes que no han podido asistir a sus cales, a personas que tenían previsto acudir a una cita médica y no han llegado a tiempo o a viajeros que han perdido el vuelo ante la imposibilidad de llegar al Aeropuerto de Jerez.
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