CGT, CNT, SAT, ASC, Cobas y Ustea vivieron un segundo 1 de mayo, condicionado por una "situación de emergencia", donde más de 3.000 manifestantes se sumaron a la convocatoria de la plataforma sevillana. Se manifestaron en muestra de repulsa de la situación actual que sufre la clase trabajadora, con más de 400.000 puestos de trabajo destruidos durante el último año, con más de 740.000 personas en ERTE amenazadas, en lo inmediato, con despidos, mientras que la patronal no ha pagado ni estos ERTE sufragados con dinero público.
Para la clase trabajadora, no solo no se han derogado las dos reformas laborales de PSOE y PP, sino que la UE pide como contrapartida una nueva reforma laboral y de pensiones, reformas que ya están cocinándose, y no podemos permitirnos estar pasivos ante ello. El propio FMI reconoce abiertamente que el desempleo no volverá en los próximos años a los niveles antes de esta pandemia, que por sí ya eran elevadísimos.
Esta situación es aún más grave en Andalucía, una tierra que han destinado únicamente para recibir turistas de “sol y playa”, al trabajo precario y superexplotado como es el trabajo bajo los plásticos de los invernaderos y con mano de obra migrante. Un paso más en ese camino es la intención de cerrar la factoría de Airbus en Puerto Real, y una situación doblemente grave sufren sectores feminizados o de mano de obra migrante, precarios entre la gente precaria.
La plataforma La lucha está en la calle resalta la "necesidad de organizarnos, movilizarnos y unirnos, los sindicatos miembros de la plataforma, CGT, CNT, SAT, ASC, Cobas y Ustea, se han conjurado para hacer frente, y con unidad, y acabar con el origen, el sistema de producción capitalista, porque permanecer pasivas significaría que machaquen nuestras condiciones de trabajo y de vida, necesitamos responder con fuerza y no dejar pasar una, porque son: o los beneficios del capital o nuestros puestos de trabajo".
Para la plataforma, "todos los días son 1 de mayo", por lo que seguirán movilizando, y llamando a la unidad de la clase trabajadora, ante tales atropellos patronales y gubernamentales, teniendo previstas diferentes movilizaciones como son el próximo 6 de mayo por una educación pública que sufre recortes graves, el próximo 9 de mayo contra el abuso de la temporalidad en la administración pública, las manifestaciones previstas exigiendo la derogación de las dos reformas laborales, o el próximo 28 de mayo con una huelga general en los servicios de Administración Pública, entre otras.
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