Un guardia civil herido en el accidente de la AP-4 en el que murieron dos agentes recibe el alta entre aplausos

Entre aplausos, de compañeros, pero también del personal sanitario, sale Alberto del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, donde permanecía desde mediados de marzo.

Alberto es guardia civil, y resultó herido en el accidente de la AP-4 provocado por un camión que se saltó un control de la Benemérita de madrugada, a la altura de la localidad sevillana de Los Palacios.

Este viernes recibe el alta hospitalaria. Como se puede ver en un vídeo compartido por el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, Alberto sale de su habitación siendo ovacionado.

"Fue uno de los heridos en el terrible accidente de la AP-4 en el que fallecieron seis personas, incluidos dos compañeros. Ha recibido el alta hospitalaria y esta es la emotiva despedida de los sanitarios del Hospital Virgen del Rocío", comenta Moreno. "Orgullo", apostilla en su mensaje.

Alberto es @guardiacivil y fue uno de los heridos en el terrible accidente de la AP-4 en el que fallecieron 6 personas, incluidos 2 compañeros.

Ha recibido el alta hospitalaria y esta es la emotiva despedida de los sanitarios del @HospitalUVRocio.

Orgullo.

👏👏👏 pic.twitter.com/zFuIz6WAsS

— Juanma Moreno (@JuanMa_Moreno) May 3, 2024

La investigación sobre las causas del accidente siguen su curso. Estaban siendo exploradas "todas las posibilidades", apuntaba el fiscal delegado de Seguridad Vial de Andalucía, Ceuta y Melilla, Luis Carlos Rodríguez León, en una entrevista en Canal Sur Radio, en la que ha detallado que las pesquisas, en las que participa la propia Guardia Civil, implican "muchos cálculos de velocidad, de fuerza o de desplazamiento" de los vehículos involucrados.

El accidente tuvo lugar en la autopista AP-4, muy cerca de Los Palacios y Villafranca, donde el conductor de un camión se saltó un control de la Guardia Civil y arrolló a agentes y a otras personas que se encontraban en el lugar de los hechos.

El suceso se produjo en torno a las 4:40 horas de la mañana. Los guardias civiles fallecidos, compañeros de Alberto, tenían en torno a 30 años, y pertenecían a un grupo especializado en la lucha contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar.