Difícil lo va a tener la ficción para superar a la realidad vivida por tres migrantes africanos que huyeron de su Nigeria natal a bordo de la pala del timón de una embarcación petrolera.
La desoladora imagen de los tres hombres ha dado la vuelta al mundo. Sin alimentos, a tan solo unos centímetros del mar y desafiando a todos los peligros marítimos, estos auténticos supervivientes lograron aguantar en tan inverosímil lugar para desplazarse.
Pero cuando llegaron a Canarias, una patrulla de Salvamento Marítimo de España avistó a los migrantes en la pala del timón y procedió a conducirlos hasta el puerto de Las Palmas.
Ahora, tras arriesgar sus vidas para llegar a suelo europeo, el Gobierno español deportará de vuelta a los tres náufragos que recorrieron el océano en la pala de un carguero que llevaba bandera de Malta.
La irrupción del grupo terrorista islámico Boko Haram, sumada a la desigualdad económica y la violencia tribal, está llevando a miles de nigerianos a salir de su país en busca de una oportunidad. La pobreza extrema afecta a 112 millones de personas en Nigeria. Más de diez millones de niños no tienen derecho a la escuela y hasta 57 millones no tienen ni siquiera acceso al agua potable.
En la noche del pasado martes, la periodista y defensora de los Derechos Humanos Helena Maleno anunció que estas personas serán deportadas por el Gobierno español. "El gobierno español deportará a los tres náufragos que durante once días recorrieron el océano en el timón de un carguero", ha publicado.
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