Save the Children ha difundido este miércoles un informe que analiza la relación entre la pobreza, especialmente en hogares con hijos, y el empleo en España. El estudio advierte que el 11,7% de los trabajadores españoles se encuentran en situación de pobreza laboral, un porcentaje que en Andalucía alcanza el 10,1%. Esta condición implica que, aunque estas personas tengan un empleo, sus ingresos no son suficientes para cubrir sus necesidades básicas.
La investigación, titulada 'Cuentas que no salen. Radiografía de la pobreza laboral en los hogares de España', se basa en el análisis de datos oficiales, como la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística (INE) y la Muestra Continua de Vidas Laborales de la Seguridad Social. Además, incluye entrevistas a familias beneficiarias de programas de Save the Children en España.
Para la ONG, estas cifras ponen de manifiesto una paradoja del mercado laboral actual: contar con un empleo ya no garantiza unas condiciones de vida dignas. La pobreza laboral refleja un sistema en el que muchas personas, a pesar de cumplir con los requisitos para llevar una vida digna, no pueden alcanzar este objetivo.
El informe destaca que el riesgo de pobreza se incrementa significativamente en hogares con niños, especialmente en Andalucía. En estas familias, la probabilidad de caer en pobreza laboral crece del 10,1% al 14,6%, y en el conjunto de España pasa del 11,7% al 17,1%, incluso cuando hay empleo en el hogar. En hogares con dos adultos sin hijos, la tasa de pobreza es del 5%, pero aumenta al 11,5% con un hijo, al 13,4% con dos y puede llegar al 23% si hay tres o más.
Las causas
Save the Children apunta dos causas principales para explicar esta situación: los salarios insuficientes y la baja intensidad en el empleo, que se refiere a trabajos con pocas horas o de manera parcial e intermitente. En cuanto a los salarios, el informe reconoce que las subidas del Salario Mínimo Interprofesional han ayudado teóricamente a superar el umbral de pobreza para quienes trabajan a jornada completa y durante la mayor parte del año.
Sin embargo, la organización insiste en que la parcialidad y la discontinuidad laboral son factores clave para comprender que una de cada cuatro personas empleadas en España que ha trabajado durante el año no gana lo suficiente para salir de la pobreza. Esta situación refleja las limitaciones del mercado laboral para garantizar ingresos adecuados y estabilidad a una parte significativa de la población trabajadora.