Tras el primer fin de semana en el que se aplican las nuevas restricciones de la Junta de Andalucía, es preciso observar si han servido de algo para aminorar la propagación del coronavirus en Sevilla capital. Para ello, se observan los datos que arrojó el último fin de semana (7 y 8 de noviembre) en el que todavía el toque de queda era a las 23:00 horas y la actividad hotelera y comercial no cerraba a las 18:00 horas.
Sevilla suma en las últimas 48 horas 941 positivos más, 165 confirmados menos que los que añadió el fin de semana sin las nuevas medidas cuando superaban el millar (1.106). Así, en total son 16.761 los contagiados en la ciudad desde marzo, siendo 3.748 detectados en las últimas dos semanas, según los datos del informe diario de la Junta. La ciudad nota una bajada poco significativa si tenemos en cuenta que en solo 24 horas, del jueves al viernes, se contabilizaban 165 positivos menos. Es decir, en un día Sevilla disminuía el mismo número de casos (165) que lo que ha sucedido en dos.
En cuanto a la tasa de incidencia, esta disminuye tras este fin de semana con 543 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, 15 menos que los que registró en el fin de semana sin las nuevas limitaciones. Este indicador se mantiene prácticamente igual en ambos periodos de tiempo, aunque es favorable que la tendencia sea hacia abajo.
Pese a las decisiones de la Junta marcadas en el BOJA, los fallecimientos no han disminuido con respecto al fin de semana anterior, al contrario, registra más del doble. Son 18 las personas que han perdido la vida a causa del virus en las últimas 48 horas, 13 más que las que murieron cuando no se habían endurecido las medidas. Además este lunes la capital alcanza las 300 muertes desde que se inició la crisis sanitaria.
Por su parte, los ingresados en los hospitales sevillanos disminuyen siendo 31 los que se incorporan este fin de semana, 9 menos que los que entraron el anterior. En cambio, el número de enfermos que requieren una plaza en las UCI sube. En dos días se suman tres pacientes más, frente a los dos que arrojó el 7 y 8 de noviembre. Tras estos días lluviosos los curados también aumentan pasando de 366 altas los días en los que Moreno anunciaba los cambios, a 552 tras el primer fin de semana de cierre.
Un vistazo general a los datos revela que la situación es prácticamente la misma con pequeñas variaciones, aunque parece que la evolución toma el rumbo del descenso en hospitalizaciones y casos confirmados.
Si tienes dudas, puedes aclarar algunos conceptos sobre cómo se ofrecen los datos aquí
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