En mitad de un mandato "singular" y "complicado", "muy complicado", insiste Jorge Rodríguez, alcalde de Trebujena desde 2012, se para a hacer balance de su gestión al frente de un Ayuntamiento en el que gobierna IU —anteriormente, el PCE— desde hace casi 40 años. "Los ciudadanos de Trebujena están acostumbrados a un gobierno de izquierdas y eso se ha reflejado durante la pandemia", sostiene, convencido de que han hecho lo "correcto", saliendo al "rescate" de los ciudadanos.
Rodríguez, junto a su equipo, se ha enfrentado en primera línea a una situación inédita como ha sido la pandemia por el coronavirus que ha tenido especial incidencia en este pueblo de unos 7.000 habitantes debido al alto número de vecinos y vecinas que se dedica al servicio sanitario. Por si fuera poco, también se ha presentado como candidato a las primarias que IU ha abierto en la provincia de Cádiz para elegir a su próximo coordinador provincial, en las que compite con José Luis Bueno, concejal en El Puerto.
¿En qué ha mejorado Trebujena estos dos años?
Cuando estalló esta crisis sanitaria, las perspectivas que tenían los ayuntamientos de avances en ciertos sectores se ciñó exclusivamente a afrontar los problemas del covid. Con esa visión, el Ayuntamiento de Trebujena ha funcionado bien. Este ayuntamiento fue de los primeros que planteó ayudas a las empresas y a los autónomos, que planteó movilizaciones y gestos en defensa de la Sanidad pública, de los primeros que planteó un batallón solidario para buscar material de protección para los sanitarios... El Ayuntamiento hizo lo correcto: reforzar los servicios sociales, ayudar a la gente que lo estaba pasando mal, de sectores como la hostelería, la agricultura, la construcción... gente que tuvo que parar. El Ayuntamiento estuvo al rescate de los ciudadanos, planteando ayudas sociales, garantizando suministros vitales básicos o el internet a todos los alumnos cuando se suspendieron las clases. También hemos puesto en marcha dos años consecutivos planes de empleo extraordinarios que han permitido a la población conseguir un empleo y generar ayudas sociales derivadas de ese empleo. Es el camino de un gobierno de izquierdas en un Ayuntamiento como Trebujena.
"El Ayuntamiento hizo lo correcto en pandemia: reforzar los servicios sociales y ayudar a la gente que lo estaba pasando mal"
Hay proyectos estrella que han anunciado, como la recuperación de las Chozas marismeñas, el teatro, el espacio museístico en el Castillo de los Guzmanes… ¿estarán antes de que termine el mandato a pesar de la pandemia?
En nuestro programa de gobierno nos habíamos comprometido a grandes hitos y seguimos adelante con ellos. También, aparte de los mencionados, apostamos por la formación online en el centro José Cabrera, que ya está en marcha. O la reciente apertura del Centro de Atención Infantil Temprana en Trebujena, que ha significado un antes y un después en el tratamiento de la salud de nuestros menores, y en la conciliación de las familias. En cuanto a proyectos culturales, antes de que termine el año queremos poner en funcionamiento el teatro. Para Trebujena la cultura es una apuesta y una inversión. También tenemos en marcha el proyecto para la rehabilitación del castillo, que va a dedicar un espacio a las artes y costumbres de Trebujena, en una apuesta clara por poner en valor el patrimonio cultural, histórico y arqueológico de nuestro pueblo. Además, damos pasos firmes y decididos en la política de participación ciudadana, de la que han nacido propuestas como la peatonalización del centro, que en esta legislatura tiene que ser una realidad. Es importante la ordenanza de rehabilitación de viviendas en el casco histórico. Queremos recuperar el centro histórico para la gente, que sea un espacio amable donde la gente viva y conviva, y que los jóvenes puedan construir viviendas en condiciones básicas.
¿Cree que se le quedará algo por hacer?
Espero que no. Después de varias legislaturas podemos garantizar que el 80-90% del programa electoral se va a plasmar y ese es nuestro compromiso. Aunque es cierto que hay infraestructuras que no dependen del Ayuntamiento de Trebujena, como la depuradora. La Junta de Andalucía lleva décadas comprometida con este pueblo para ejecutar las obras, y estamos reivindicándolo para que se adjudique cuanto antes, porque es una necesidad ambiental.
¿Qué supone para Trebujena que sea considerada zona de crianza de vino de Jerez?
Es un hito histórico. Al que no conozca nuestro pueblo igual le puede parecer poco importante, pero viene a corregir una discriminación clara y absoluta. Los viticultores de Trebujena y las cooperativas solo podían vender caldos en forma de mosto a las cooperativas y multinacionales del vino para que lo convirtieran en vino de Jerez y lo comercializaran. Ahora se permitirá que pueblos como Trebujena, con casi 700 socios entre sus dos cooperativas, puedan embotellar sus propios vinos con la etiqueta y la denominación de origen Jerez-Xérès-Sherry. Esto abre una oportunidad importante a los viticultores de Trebujena, que llevan muchos años aportando un porcentaje de la venta de sus mostos a promocionar las ventas de los vinos de Jerez, pero no se beneficiaban de eso. Una injusticia de décadas.
¿Trebujena por fin está mirando a la marisma para generar empleo?
Trebujena ha sido muy castigada por la pesca, pero nunca le hemos dado la espalda. Éramos la única localidad de Sevilla y Cádiz que se dedicaba a la pesca en el Guadalquivir, con las angulas y los camarones. La Junta prohibió la pesca con una moratoria de diez años, entendible desde el punto de vista medioambiental, pero paró la relación de Trebujena con el río. En los últimos años se está potenciando mucho el turismo en la marisma, esa oportunidad se ha abierto con la pandemia. La gente ahora valora más los espacios naturales.
"Hay que mirarse el ombligo muy poco, hay que ser solidario y generoso desde la autonomía de cada una de las organizaciones"
En medio de este mandato, también ha anunciado su candidatura para liderar IU en la provincia de Cádiz, ¿por qué ha dado el paso?
Los militantes de nuestra organización tenemos que estar cuando ésta nos lo pide. Durante un proceso de debate interno me pidieron personalmente que diera un paso al frente para liderar IU en la provincia de Cádiz. Yo soy de la opinión de que cuando se está en política hay que poner tus conocimientos y tu disposición al servicio de la organización. En eso estamos y estoy dispuesto a darlo todo en esta campaña, corta pero intensa. Creo que tengo capacidad para liderar un proyecto ilusionante de la izquierda en la provincia de Cádiz ante un panorama político muy complejo. Me duele especialmente la ruptura en parte de la izquierda en Andalucía. Es preocupante la ruptura del grupo Adelante, por ejemplo. IU tiene el deber de volver a intentar esa unidad en la izquierda de nuestra provincia que nos piden los ciudadanos. Hay que mirarse el ombligo muy poco, hay que ser solidario y generoso desde la autonomía de cada una de las organizaciones.
¿Es partidario de reagrupar a la izquierda entonces?
Tenemos que intentarlo por todos los medios, haya pasado lo que haya pasado. Hay que volver a sentarse, a coser las costuras. Eso no se consigue sentándose las cúpulas de los partidos para decidir los candidatos de cada uno. Hay un espacio amable en la provincia de Cádiz y debemos intentar esa confluencia, pero no entre dos organizaciones políticas. En base a ese fortalecimiento que planteamos desde IU, esos espacios funcionarán mejor si IU está fuerte, porque tenemos militancia, tenemos bases, gente en todos los municipios, activistas en todos los sectores... por lo que hay más posibilidades de que se pueda generar ese espacio de izquierdas amable y que la gente se sienta representada.
Cuando habla de esa confluencia no se refiere solo a Podemos e IU, entiendo...
Por supuesto que no, sino a todo el espacio de la izquierda. No nos podemos permitir que, de cara a las próximas elecciones en Andalucía, la gente que se sienta de izquierdas tenga cuatro papeletas diferentes, y todas ellas válidas. Hay que poner en común lo que nos suma y dejar a un lado las diferencias. Lo hemos hecho en Trebujena. La confluencia como yo la entiendo es escuchar la voz de la calle y plantearle a esa gente que necesita espacios de movilización que la solución para cambiar las políticas de Andalucía es participar en un proyecto político de izquierdas que genere ilusión.
"La confluencia como yo la entiendo es escuchar la voz de la calle y plantearle a la gente soluciones desde un proyecto político de izquierdas que genere ilusión"
¿Es posible exportar detalles del modelo de Trebujena a la provincia?
Estoy convencido. Las organizaciones políticas, los sindicatos y movimientos sociales tenemos la obligación de dejar a un lado lo que nos separa y poner en común lo que nos une. Se pueden dar esas circunstancias a nivel provincial y andaluz, pero hay que tener altura de miras. Todavía estamos a tiempo de plantear la unidad, entendida desde abajo, donde estén representados los sectores de la lucha, para conseguir cierta hegemonía y pararle los pies a la derecha. Hay que intentarlo, desde el respeto a la autonomía de las distintas organizaciones.
¿Ser coordinador provincial de IU, en caso de ganar, significaría no ser candidato a la Alcaldía de Trebujena en 2023?
No tiene nada que ver. Los cargos son compatibles, aunque lógicamente es un debate que se tendrá que plantear en la asamblea de Trebujena. Yo creo que en los sitios hay que estar al 100%, no se puede estar compatibilizando cargos de gran responsabilidad, pero para llegar a ese debate primero tiene que ganar mi candidatura. En el caso de que gane, le tenderé la mano y buscaremos la integración de los compañeros de la otra, y en caso de no salir vencedor, muestro mi disposición a integrarnos con la otra candidatura para pelear por el fortalecimiento de IU.
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