Tras varios días sin exponerse después de que el debate no le saliera demasiado bien, Macarena Olona vuelve este viernes a un escenario con la compañía de Santiago Abascal para retomar la campaña de Vox de cara al próximo 19 de junio. Durante estos días, la candidata de extrema derecha únicamente ha concedido un par de entrevistas en medios privados y ha dado paseos por algunas localidades. También ha visitado el puesto de mando del incendio en la provincia de Málaga.
Su campaña estos días se ha basado en vídeos dirigidos con los que ha intentado paliar las consecuencias del debate. No supo combatir ni los silencios ni los enfrentamientos. Entre otras cosas, porque Olono asistía con un discurso impostado, basado en el argumentario general que tiene Vox para el conjunto de España, mostrando su desconocimiento de la realidad concreta de Andalucía y sin propuestas para solucionar los problemas de los andaluces. Todo ello, en un debate enfocado a lo autonómico, quedó en evidencia.
Una de las bazas de Olona está siendo mostrarse más andaluza que nadie después de las dudas de su empadronamiento y de que no había vivido jamás en Andalucía. Sin embargo, para la candidata de Vox, ser andaluza simplemente es vestirse con los trajes típicos andaluces en sus fiestas populares. De momento, su campaña se resume en eso. Ya mostró una foto de flamenca hace unos meses con la que Teresa Rodríguez la acusó de disfrazarse.
Este viernes ha señalado en su perfil de twitter que quedan nueve días para la cita electoral con una foto en la que aparece con un abanico. Más allá de estas imágenes folclóricas, en las que representa a una Andalucía llena de tópicos, la campaña sobre los problemas de la sociedad andaluza se reduce a la nada.
Tal es así que el programa electoral de Vox ni siquiera tiene propuestas y prácticamente no tiene páginas. Está basado en cuestiones muy genéricas y reutilizables en cualquier punto del país. En ningún momento se habla de cifras y datos que protagonicen la realidad andaluza. Esta puesta en escena forzada ha provocado muchas críticas en las redes sociales, donde se le acusa de considerar Andalucía un parque temático.
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