La fiscalidad dificulta el acuerdo presupuestario andaluz entre PP y PSOE

PP, Cs y Vox aprueban el proyecto de Ley de Tributos Cedidos en el Parlamento, un debate precedido por la polémica por el tuit de los populares andaluces donde presumían de deducir impuestos a las familias ricas

Moreno Bonilla conversa con Sánchez, en presencia de Espadas, en días pasados en la inauguración del Foro Urbano de España.

Como viene siendo habitual en el último mes, en cada rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía comienza la partida de ajedrez semanal en el tablero político andaluz. La coalición de PP y Ciudadanos parece convencida de poder finalizarla sin contratiempos. Esta semana, de nuevo, imagen de unidad con Elías Bendodo y Juan Marín al frente.

Normalmente, el Partido Popular pone sus límites y tanto Vox como PSOE reaccionan a ellos. Esta vez también ha tenido algo que decir Juan Marín por parte de Cs y, además, el Ejecutivo contaba con la referencia del acto en Sevilla de Macarena Olona, de Vox, en el día del Pilar. Todo ello en la mañana previa del pleno de por la tarde en el que las tres formaciones políticas sacaron adelante una nueva bajada de impuestos con la aprobación de la Ley de Tributos Cedidos. Una materia en la que los tres partidos políticos apenas han mostrado diferencias durante la legislatura. Aun así, la semana pasada Manuel Gavira, portavoz de Vox, ya se encargó de advertir que “Vox no había venido solamente a bajar impuestos”.

La ley, a priori fácil de vender de cara a la opinión pública, se ha visto salpicada en las últimas horas por un —torpe— tuit del Partido Popular que mencionaba las deducciones en las familias que ganan 80.000 euros al año. Poco debate tiene que este tipo de familias acaudaladas son las menos en Andalucía. Los socialistas no tardaron demasiado en recriminar esto y hacer público que propusieron acotarlo a rentas individuales de 25.000 euros (la media no pasa de esta cantidad) o conjuntas de 30.000. La traducción de todo esto es que también este pasado martes hubo una enmienda a la totalidad del PSOE contra la Ley de Tasas y Precios Públicos cuando parecía que las posturas se acercaban de cara a la negociación de los próximos Presupuestos de Andalucía.

El parlamentario socialista José Antonio Hidalgo ha defendido que el PSOE-A ha presentado esta enmienda a la totalidad "por tres razones", que son una "falta de transparencia a la hora de la recaudación y de los ingresos públicos", porque por parte del Gobierno andaluz "no han tenido en cuenta la capacidad económica", y porque han presentado esta norma "en un momento inoportuno".

Finalmente, PP-A, Ciudadanos (Cs), Vox y Unidas Podemos por Andalucía han votado en contra de dicha enmienda a la totalidad, a la que se han abstenido los diputados no adscritos procedentes de Adelante Andalucía, y que ha sido así rechazada. De esta forma, el proyecto de Ley de Tasas y Precios Públicos de Andalucía continuará ahora su tramitación en la comisión de Hacienda y Financiación Europea del Parlamento.

La portavoz socialista, Ángeles Férriz, ya avisó en una entrevista concedida a lavozdelsur.es este pasado domingo que ellos apostaban por una política fiscal progresiva y de que había que preocuparse sobre a quién se priorizaba en la recuperación económica. “En las rebajas fiscales del Gobierno a las clases medias y bajas siempre les toca la pedrea”, expresaba Férriz. En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno ha sido el turno de la otra parte. Bendodo ha marcado como línea roja o eje de actuación del Gobierno la bajada de impuestos, “el que quiera apoyarnos tiene que tenerlo muy claro”.

Después de enumerar varios impuestos que se van a bajar, algunos de ellos dejando a un lado la progresividad, como en el caso de las transmisiones patrimoniales donde se pasa a un tipo único del 7%, Bendodo ha acusado al Partido Socialista de haber convertido anteriormente Andalucía en un “infierno fiscal” y ha dejado claro que estas bajadas de impuestos son “un camino sin vuelta atrás” y “una autopista para la inversión”. Sin embargo, no ha dejado pasar la oportunidad de pedir al socialismo “que se sume, están a tiempo”.

Por su parte, Juan Marín, como viene siendo costumbre, ha sido más duro con el PSOE-A, concretamente con Juan Espadas. El vicepresidente de la Junta ha acusado a los socialistas de “llevar en el ADN subir impuestos a los andaluces”. En lo que respecta al líder del PSOE-A, el vicepresidente ha afirmado no fiarse de él por “tener dos caras”. Las dos caras de Espadas, según Marín, corresponden a mostrarse dispuesto a negociar los Presupuestos y, posteriormente, hacer lo que le ordene Pedro Sánchez, “hoy estamos viendo la cara B”, decía el vicepresidente en referencia al rechazo a la Ley de Tributos Cedidos por parte del PSOE.

Para el líder de la formación naranja sería “contradictorio” que el PSOE-A rechazara la bajada de impuestos y, posteriormente, aprobara unos Presupuestos que, precisamente, contemplan esta reducción de la fiscalidad. Por ello, el vicepresidente de la Junta ha solicitado a Juan Espadas que “se salga del lado oscuro y venga a la política real”.

El enfrentamiento con el PSOE no se ha quedado sólo en Andalucía. Desde el Gobierno andaluz también han lanzado críticas a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero por los Presupuestos Generales del Estado. Desde la Junta afirman que van a estar “muy vigilantes de cara a la factura que haya que pagar a independentistas y nacionalistas para que aprueben los presupuestos”.

El principal blanco de las críticas ha sido la posibilidad de que se realice una armonización fiscal en el país. Bendodo ha denunciado la invasión de competencias si se lleva a cabo esta medida. Por su parte, Marín espera que se debata en el Consejo de Política Fiscal y Financiera lo que ha catalogado como “una patata caliente” para el Gobierno y ha solicitado que la armonización, si se lleva a cabo, sea a la baja. Lo más destacable del discurso de Marín en esta cuestión ha sido pedir que se incluya en esta discusión al País Vasco y Navarra, dos comunidades a las que la Constitución Española deja fuera del régimen común de financiación.

"Estamos ya en el 'top' cinco de comunidades con menos presión fiscal"

El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, ha subrayado este pasado miércoles, tras la aprobación de la Proposición de Ley de Tributos Cedidos de Andalucía, que modifica la tributación de cinco impuestos y una tasa fiscal sobre el juego, que "estamos ya en el top cinco de comunidades con menos presión fiscal", por lo que ha subrayado que con este paso tributario "todos salen beneficiados porque hacemos una Andalucía más justa desde el punto de vista impositivo, pero también una Comunidad atractiva para la inversión".

En declaraciones a los medios de comunicación en el Parlamento de Andalucía tras la aprobación de la Proposición de Ley de Tributos Cedidos, apoyada en la alianza de PP, Cs y Vox, Moreno ha subrayado "la satisfacción mía personal por el trabajo de la Consejería de Hacienda por hacer algo que parecía imposible: bajar los impuestos al conjunto de los andaluces, a quienes viven en el campo, en la ciudad, al joven, al mayor, al hombre, la mujer".

El presidente de la Junta de Andalucía ha subrayado que la nueva reforma tributaria de Andalucía "ha conseguido algo imposible", hecho que ha situado en "la capacidad de ingresar 600 millones de euros con 125.000, 135.000 nuevos contribuyentes", hecho que ha fundamentado en "una política fiscal más amable".