Las cinco personas detenidas acusadas de arrojar durante una persecución tres cuerpos en la A-480, en el término municipal de Chipiona, de los que uno ha resultado fallecido y los otros dos heridos de gravedad, pasarán a disposición judicial este miércoles.
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía señala que los detenidos pasarán a disposición del Juzgado mixto número 1 de Sanlúcar de Barrameda, el cual una vez los oigan en declaración, determinará si toma o no medidas cautelares. La Guardia Civil detuvo en la tarde de este pasado domingo entre las provincias de Cádiz y Sevilla a estas cinco personas.
En un comunicado difundido a los medios de comunicación, el Instituto Armado ha precisado que los hechos parten de la provincia de Cádiz sobre las 17:00 horas cuando un ciudadano alertó a la Policía Nacional de que en la carretera A-480, a la altura del kilómetro 5, una furgoneta había "tirado a la vía a tres varones", desconociendo si están vivos o muertos.
En este momento, la sala de la Policía Nacional pasó el aviso a la de Guardia Civil, ya que le corresponde la investigación de los hechos. Por su parte, la central de la Benemérita organizó un dispositivo de interceptación de la furgoneta y el turismo en el que se desplazan los implicados en los hechos investigados.
Por otra parte, un guardia civil fuera de servicio con destino en la Comandancia de Cádiz recibió la descripción de los vehículos por parte de un compañero e informó al centro coordinador que acaban de adelantarle los vehículos descritos "a gran velocidad con dirección a Sevilla".
Así, siempre según la Benemérita, el agente consiguió alcanzar a la furgoneta y al turismo, comunicando la posición de los vehículos y "siendo en todo momento los ojos de la central para organizar la intercepción". Fruto de esta acción se procede a la intercepción del turismo en la carretera A-66 por parte de patrullas de la comandancia de Sevilla logrando así la detención de cuatro varones extranjeros.
Paralelamente, en Sevilla capital, la Policía Local, que había sido alertada al igual que la Policía Nacional del dispositivo, interceptó la furgoneta en el que viajaba un quinto implicado en los hechos investigados. Además, portaba un "arma larga" y trató de huir a pie. Así, los agentes se vieron obligados a efectuar disparos al aire para reducir a esta persona.
Respecto a los cuerpos arrojados, finalmente uno ha fallecido y otros dos se encuentran heridos de gravedad, por lo que están siendo atendidos en un centro hospitalario de la provincia de Cádiz. Durante la persecución han participado más de 20 patrullas de la Guardia Civil, varias dotaciones de Policía Local y de Policía Nacional que se encontraban disponibles en Sevilla capital.
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