La falta de agua en las cuencas andaluzas ha llevado a la consejera de Agricultura, Pesca, Ganadería y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, a afirmar que, debido a la situación actual, se podrían plantear más restricciones. De momento, estas sólo afectan a los regantes, con los que ya se han acordado algunas medidas a través de los comités de explotación, que tendrán que volver a reunirse en caso de que la situación se agrave.
La situación de Andalucía no es buena. Más allá de la declaración de sequía en la cuenca del Guadalquivir, dependiente del Estado y que actualmente se encuentra en el 26% de su total, la Junta gestiona otras tres que de media se encuentran en el 39,49% de su capacidad. En concreto, la de Tinto-Odiel-Piedras, en Huelva, con el 57% de su capacidad, Guadalete-Barbate al 30,17 y las Mediterráneas al 36,12%.
Los datos se traducen en que la situación es delicada en determinadas zonas. Los sistemas de Barbate y La Viñuela-Axarquía se encuentran “en situación de emergencia”, el de Guadalete en “alerta” y Guadalhorce-Limonero en “prealerta”. Sólo la cuenca onubense al completo, la Costa del Sol occidental y Béznar-Rules pueden considerarse en situación de normalidad, según ha manifestado Carmen Crespo.
Por todo ello, desde la Junta de Andalucía se ha solicitado por carta una reunión calificada como urgente por el Gobierno con el secretario de Estado de Medio Ambiente para “abordar la cuestión de la sequía" en Andalucía. La intención de la Junta de Andalucía es abordar con el Gobierno de España la posibilidad de que los fondos europeos Next Generetion de Recuperación y Resiliencia se puedan utilizar de forma inmediata para “un bien común”. Desde la Junta se asegura que “nosotros solos no podemos porque son competencias estatales”. Crespo ha pedido la ayuda del Estado a través de estos fondos “para hacer actuaciones que son interés del Estado”. Además, la consejera ha advertido de que, si no se abordan las diferentes obras con estos fondos, “va a ser muy difícil que la administración tenga recursos económicos para estas infraestructuras en otro momento”.
Algunas infraestructuras a las que hacen referencia desde la Junta y las cuales ha calificado como “de interés del Estado y absolutamente necesarias para nuestra tierra” son el túnel de San Silvestre y la presa de Alcolea en Huelva o la ampliación de la desaladora de Carboneras, en Almería. “La Junta de Andalucía va a hacer todas las actuaciones que tengamos a nuestra mano”, ha señalado Crespo. La titular de Agricultura, Pesca, Ganadería y Desarrollo Rural también ha defendido que el 31% de las inversiones que realiza el Gobierno andaluz va destinado al agua.
La crítica a gobiernos anteriores no ha faltado. La situación actual, según el Ejecutivo, se debe a que “estaba todo por hacer en agua”. Para la consejera, “si hubiéramos tenido esto antes, tendríamos que hacer ahora muy pocas actuaciones”. Aun así, la Junta ha recalcado que está dispuesta a hacerlo todo en el menor tiempo posible.
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