La Junta de Andalucía ha aprobado este lunes en el Consejo de Gobierno celebrado en el Palacio de San Telmo su cuarto decreto de sequía para hacer frente a la situación de escasez que existe actualmente en la comunidad, con unos embalses al 20% de su capacidad. En concreto, el Gobierno andaluz va a movilizar 217 millones de euros con los que activará nuevas acciones para luchar contra la ausencia de lluvias y poner en circulación 81 hectómetros cúbicos más.
Con este decreto ya son 500 millones los que la Junta ha invertido en materia de agua. No obstante, desde el PSOE denuncian que el 60% de dicho presupuesto sigue sin ejecutarse y que obras anunciadas en 2020 aún no se han finalizado. En materia de inversiones hídricas, el decreto incluye una serie de actuaciones inmediatas y prioritarias que estarán concluidas el próximo verano, destina 40 millones de euros a una nueva vía de colaboración con los municipios más pequeños a través de convenios con las diputaciones provinciales para paliar las fugas en la red y apuesta por las aguas regeneradas para garantizar el suministro a los sectores productivos.
La propia consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha reconocido que Andalucía se encuentra en una situación "límite". Es decir, la Junta no tiene capacidad de hacer más, por lo que desde el Gobierno andaluz se ha vuelto a pedir colaboración del resto de administraciones. Juanma Moreno, de hecho, viajará a Bruselas esta semana con el objetivo de convencer a las instituciones europeas para que aporten dinero a Andalucía en esta cuestión. "Esperamos que las demás administraciones se ponga también las pilas", ha señalado Crespo, quien también ha reconocido que ahora mismo hay un canal de diálogo abierto con el Gobierno de España.
El cuarto decreto de sequía también contempla un segundo bloque de actuaciones prioritarias con obras a medio plazo, más allá del verano, así como el auxilio a zonas necesitadas fuera de las cuencas hidrográficas de competencia autonómica.
El decreto incluye obras en todo el territorio. Desde la provincia de Huelva hasta la de Almería para mejorar el abastecimiento, aprovechar recursos subterráneos o realizar obras en los puertos para que en los casos más extremos se pueda trasladar el agua en barco de unas provincias a otras. La Junta señala como principal clave para solucionar la situación el incremento de desaladoras, un tema que ha provocado una gran polémica con el Gobierno de España.
Habrá un rescate del sector agrícola para poner en circulación 39 hectómetros cúbicos para los sectores productivos. En este ámbito, la Junta prepara la construcción de nuevos terciarios en Jerez, el Bajo Guadalhorce, Antequera, Gualdahorce y Motril.
Además de estas actuaciones, el cuarto decreto de sequía incluye ayudas al sector primario andaluz a través de líneas directas, exenciones fiscales y nuevas infraestructuras para aportar la conexión a las aguas regeneradas a los regantes y agricultores.
Crespo ha destacado que la gran novedad es la línea específica dotada con 50 millones de euros para recuperar el potencial productivo para los cultivos más afectados por la sequía, mientras que para la ganadería se mantiene la excepción para la alimentación convencional del ganado ecológico por la situación de sequía.
El melón del turismo
A pesar del problema de abastecimiento que existe actualmente (los socialistas han denunciado este lunes que cinco millones de andaluces ya tiene restricciones en el suministro humano), la Junta no parece dispuesta a poner límites al turismo, factor que supone por motivos evidentes de aumento de población un incremento en el consumo de agua.
Juanma Moreno ya anunció en Fitur que el objetivo, aunque la situación es delicada, es superar en 2024 el número de turistas que Andalucía ha recibido en 2023. La consejera Carmen Crespo ha respaldado esta idea señalando que la intención del Gobierno es que se exploten todas las posibilidades hídricas para que no haya problemas en verano en municipios, por ejemplo, como Fuengirola donde la población se multiplica por tres.
La oposición, pese a la postura de la Junta de Andalucía, sigue apretando para intentar torcer el brazo al Ejecutivo. La formación Adelante ha vuelto a criticar el camino tomado por el Gobierno que preside Juanma Moreno al seguir permitiendo que los turistas tengan un "gasto libre" de agua en municipios que ya tienen restricciones.
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