Bornos, en la Sierra de Cádiz, fue considerado cuna del Renacimiento en la Baja Andalucía, destacando entre sus monumentos el Castillo-Palacio de los Ribera. Dentro del monumental palacio hay un tesoro. Un tesoro que acaba de recibir un premio. El jurado de la cuarta edición del Premio Fundación Casas Históricas y Singulares de España ha otorgado al Ayuntamiento de Bornos y Coto de Bornos un reconocimiento por la recuperación de los jardines de origen renacentista del Castillo Palacio de los Ribera, según ha informado el alcalde, Hugo Palomares.
"Acabamos de recibir una noticia que nos llena de orgullo y confirma que desde hace un tiempo se está haciendo una buena labor en relación a la protección del patrimonio histórico de nuestro pueblo y su puesta en valor", dijo hace unos días el también candidato a la reelección este domingo.
La Fundación de Casas Históricas y Singulares de España es una entidad sin ánimo lucro e inscrita en el Registro de Fundaciones del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Desde su constitución, trabaja con los propietarios de inmuebles históricos que integran la Asociación de Propietarios de Casas Históricas y Singulares de España, para promover, ante toda la sociedad española, el conocimiento de estos bienes patrimoniales y el esfuerzo que realizan sus titulares para conservarlo.
En el centro de este enclave, contaba recientemente lavozdelsur.es en un reportaje en este recinto, se encuentran los imponentes jardines construidos por orden de Per Afán Tercero con la intención de dejar constancia de su paso por esta casa palaciega al igual que lo había hecho su tío.
Copiando el estilo de los Jardines de Belvedere en Roma levantaron este espacio a pequeña escala pero que destaca tanto en una población que ronda los 8.000 habitantes como es Bornos. En este espacio se encuentran varias especies de árboles que fueron traídos de otros puntos del mundo expresamente para ser plantados a modo de exposición en este lugar.
Uno de los que tiene una historia más curiosa es el fresno blanco, cuya procedencia y año de llegada es desconocida pero que fue literalmente partido por un rayo hace muchos años. Se pensó que estaba muerto y se taló por la copa, pero continuó creciendo y acabó dejándose tal y como había quedado. También hay ejemplares muy raros en la zona como los magnolios gigantes o la jacaranda regalada por el mismísimo duque de Windsor, que lo envió desde el Palacio de Buckingham.
"En estos años hemos propiciado, con el apoyo de muchos de nuestros paisanos, la rehabilitación de la logia, la reforma del Patio de Armas y potenciado los trabajos de jardinería. Ya hemos preparado el proyecto para arreglar los muros exteriores del Castillo Palacio de los Ribera y, todo ello, sin olvidar el trabajo pendiente de otros monumentos de nuestro pueblo. Un premio de esta categoría siempre es un motivo de satisfacción. En este ámbito, como en tantos otros, hay muchísimo trabajo invisible cuyos frutos no siempre se obtienen de forma inmediata. Además, también hay una labor encomiable de los/as técnicos/as a los/as que debo reconocer su compromiso", ha mantenido Palomares.
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