Corrales romanos y pinares repletos de camaleones, un castillo-palacio, una subasta en la lonja pesquera, una fábrica con quesos de todos los colores, y un centro para saber qué es la 'Mayetería roteña', algunos atractivos en una villa que es mucho más que la Base.
Cuando uno recorría de pequeño los kilómetros que separan Jerez de Rota tenía una extraña sensación de no saber muy bien a dónde se dirigía. Para alcanzar la entonces playa casi virgen de Punta Candor había que ver desde la ventanilla del coche un local en medio de la nada con unos enormes labios con carmín luminoso, pasar delante de una cárcel y circular junto a un enorme vallado con espinos y cámaras de vídeo vigilancia. Ya ha llovido. Hoy en día, de aquel club de carretera solo quedan ruinas; hay una moderna prisión con todas las comodidades, Puerto III, frente a la vetusta ciudad penitenciaria de Puerto II; y la valla de esa base norteamericana levantada con el franquismo separa el mundo civil del que sigue siendo uno de los enclaves estratégico militares más importantes del mundo.
La prueba es que el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, rinde visita a la base aeronaval en una de las paradas de su gira española. Allí hay un enorme escudo antimisiles con cuatro destructores, millares de habitantes, y recuerdo que una vez entré y vi las pizzas más enormes que había probado en mi vida y un cine de verano para ver las películas desde el coche. Pero, ¿qué no debería perderse el Nobel de la Paz de la villa de Rota aparte de pisar territorio yankee en suelo español? Este pueblo de apenas 30.000 habitantes remonta sus orígenes a los mercaderes fenicios pero en la zona ha llegado a encontrarse una necrópolis de la Edad del Cobre. Con los romanos, dicen los historiadores, aparece más tarde uno de los atractivos imprescindibles que hay que ver en cualquier visita que se precie a esta bella localidad costera.
1. Corrales romanos, camaleones, dunas y un jardín botánico. Con un total de ocho unidades, los corrales roteños fueron el primer Monumento Natural declarado en Andalucía bajo la protección de esta figura ambiental. Estos elementos son parcelas delimitadas por muretes de construcción artificial que separan la superficie en distintos compartimentos, que son visibles durante los periodos de bajamar. Cuando sube la marea entran peces, sepias y pulpos, que quedan atrapados en las jaulas de piedra cuando ésta baja. Ahí se recolectan "con aperos tradicionales como el francajo, el cuchillo de marea y la tarraya. También son inigualables para mariscar, especialmente ostiones y percebes. Toda esta riqueza sustenta a aves marinas y limícolas procedentes de otros espacios gaditanos, que descansan o se alimentan aquí, aseguran en la web de Turismo Andaluz. El arte del marisqueo es la base de una visita guiada que organiza el Ayuntamiento roteño, en función de las mareas, al precio de 1 euro, y en la que se puede contemplar la belleza de esta técnica recolectora milenaria.
En su litoral, está la mayor reserva nacional de camaleones, mientras que las playas de la costa de la Luz son apacibles y con mucho encanto natural entre pinares, dunas y mar azul. También merece la pena visitar, si de lo que turismo natural se trata, el Jardín Botánico Celestino Mutis de Rota, con más de 5.000 metros cuadrados de una gran diversidad de especies de flora de todo el planeta y alguna especie animal como esa curiosa especie de lagarto que cambia de color.
2. Lonja pesquera. Ver una subasta de pescado es un espectáculo. En la lonja pesquera de Rota no solo puede disfrutar viendo la puja de los detallistas con el alba sino que el entorno también es espectacular, junto al puerto y al faro primitivo de la localidad, de principios del siglo pasado. También anda cerca el puerto deportivo Astaroth, que toma su nombre de la denominación que recibía Rota en el tartésico, una de las primeras culturas que se asientan en esta tierra. Fue inaugurado en 1992 con motivo del mundial de Vela en la clase 470. Por un euro, hay visitas guiadas cada martes a la lonja roteña. Toda una experiencia.
3. Centro de Interpretación de la Mayetería. Incluye un taller y una degustación del típico y sabroso arranque roteño. Esta excursión guiada tiene lugar cada jueves desde las 9:15 horas, con un precio de 3,55 los adultos y 1,85 euros los niños. En una parcela dos hectáreas, este centro de naturaleza permite conocer a fondo el tipo de chozas antiguas en las que vivían los mayetos roteños, el huerto que cultivaban a mano, los animales de granja que cuidaban, plantas autóctonas de la zona… Es imprescindible echar un ojo a la zona de viñedo, en la que se recupera la uva tintilla de Rota como variedad tinta exclusiva de la zona; y también a los establos de los animales, donde se puede encontrar la mula con la que se aran los terrenos de los huertos, cabras, gallinas, palomos, conejos de campo, ovejas, vaca, burros y una yegua.
4. El Bucarito: 'Cheesestorming'. Visitar la granja de El Bucarito es que te arrecie una tormenta de quesos. Así incluso han dado en llamar a una campaña nacional de apuesta por estos productos artesanos en la que, por descontado, se incluye la marca roteña. La visita nos adentra en el proceso de elaboración de quesos de todos los colores y sabores, además de embutidos. Puedes ver a las cabras pastando y también una pequeña manada de burros andaluces que tienen también en la granja. Desde la tienda hay posibilidad incluso de disfrutar de cómo se elabora el queso gracias a una zona acristalada que permite ver todo el proceso. Desde luego, si va a llevar a cabo la visita a esta empresa agroalimentaria familiar opte por la visita que incluye degustación. No se arrepentirá. Más información en el teléfono 956101264; y en el correo electrónico reservas@elbucarito.es. El horario de visitas es de lunes a sábados previa concertación.
5. El Castillo-Palacio de Luna. El Castillo-Palacio de Luna está situado en el centro de la villa. Este Castillo fue un antiguo ribat musulmán (s. XI), residencia de Safat Dola y reconquistado por Alfonso X El Sabio. Lo mandó construir Don Alonso Pérez de Guzmán El Bueno en el siglo XIII (1295) sobre los restos de dicho ribat, y luego se lo entregó a la villa de Rota. Tiene patio de armas, la Virgen de la Granada —que representa la fertilidad—, el llamado Costurero de la Duquesa, e imprescindibles vistas entre las almenas. Es la sede del Ayuntamiento de la localidad. Dentro de la ruta Un paseo por la historia puede visitarse este monumento por 1 euro con guía incluido los sábados a las 20 horas, y los domingos a las 10:15. También puede añadir la Iglesia de O (siglo XVI) al recorrido por el mismo precio pero los sábados a las 10:15 horas, y los domingos a las 19 horas.
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