Llega el final del drama político más exitoso de los últimos años. Movistar Series estrena el 3 de noviembre, tan solo un día después de su lanzamiento en Estados Unidos, la sexta temporada de House of Cards. Si por algo está marcada la última tanda de capítulos de esta ficción de Netflix es por la ausencia de Kevin Spacey. El actor era el encargado de dar vida a Frank Underwood, el protagonista de la serie. En noviembre del año pasado, cuando fue denunciado por acoso sexual, Netflix tomó la decisión de retirarle de este y de todos los proyectos en los que contaba con él. Fue un momento complicado.
La última temporada de House of Cards ya se encontraba en fase de post producción y había que tomar la decisión de parar y cancelarla o de rehacer un trabajo en el que se había invertido mucho tiempo y dinero. Lejos de no continuar con la serie decidieron darle la vuelta a la historia y otorgarle el poder Claire Underwood, personaje interpretado por Robin Wright. Esta decisión fue muy bien acogida por la crítica y por los seguidores, que tras cinco temporadas y antes de que sucediese lo de Spacey ya pedían a gritos que Claire cobrase el protagonismo que merecía. Además, para paliar el daño que puede hacer la ausencia del anterior protagonista, se han incorporado al reparto de la sexta temporada actrices como Diane Lane y Greg Kinnear y han regresado actores como Michael Kelly, Patricia Clarkson o Campbell Scott.
Para no dejar que lo sucedido empañara la imagen de una de las ficciones más aclamadas de los últimos años, ganadora de varios premios Emmy y Globos de Oro, Netflix ha sabido aprovechar la polémica y ha convertido el caso Spacey en una oportunidad para promocionar la serie y mantener su buena reputación. Entre otras acciones han reutilizado uno de los pósteres de la primera temporada, en el que aparecía un desafiante Frank Underwood sentado en un sillón, y han puesto en su lugar la imagen de Claire Underwood. Otra de las acciones que han llamado la atención en los últimos meses ha sido el teaser en el que aparece la tumba de Frank Underwood, una imagen con la que han dejado claro que este es el final del personaje.
Tras un año trabajando a contrarreloj, los últimos ocho capítulos de la serie dirigida por David Fincher por fin ven la luz. La quinta temporada finalizó con una imagen de Claire Underwood en la Casa Blanca pronunciando dos palabras: “Mi turno”. Y así va a ser. Con la ausencia del ex presidente estadounidense Frank Underwood, Claire cobrará el protagonismo que siempre ha ansiado. La que fuera primera dama y vicepresidenta estadounidense, ahora toma el poder que hasta el momento pertenecía a su marido. Los enfrentamientos con Frank, su deslealtad y su falta de ética por fin tienen la recompensa que la actual presidenta tanto deseaba. Y por si esto no fuera suficiente cuenta con la ventaja de no tener al lado a la única persona que hasta el momento era capaz de hacerle sombra.
En las imágenes promocionales de la temporada se ve que la primera mujer presidenta de Estados Unidos lo va a tener todo en contra para conservar el poder. Seguro que para mantenerse en la cima, que es lo único que le importa, Claire hará gala una vez más de su inteligencia, mucho más elevada que la de su difunto marido, y utilizará las estrategias más enrevesadas para gobernar. De esta forma el final de este culebrón político estará marcado por las consecuencias del #MeToo y por tener como protagonista a una mujer que ha sido la única capaz de lograr que House of Cards no se vaya por la puerta de atrás.


