Reconoce abiertamente que lo suyo por la cocina se convirtió hace cinco años en una afición casual y que sus conocimientos no pasaban más allá de hacer el típico huevo frito o el filete a la plancha. De hecho su principal pasión era la enfermería, de la que se ha graduado hace poco más de un año. Pero a Mery García Butrón (Chiclana de la Frontera, 1994) y a su hermano Juan Manuel les llamaba poderosamente la atención el mundo de Youtube y todo lo que le rodeaba. Así que le propusieron a su madre Carmen, una gran cocinillas, abrir un canal dedicado a la gastronomía, para que pudiera transmitir a todos aquellos que lo desearan sus recetas y su buen hacer en los fogones. Pero ésta no lo vio claro. Pensó en el qué dirían sus vecinas y la vergüenza acabó echándola para atrás.
Mery, ni corta ni perezosa, le propuso llevar adelante el canal transmitiendo, eso sí, sus recetas. De eso hace un lustro. Cocina para todos, como fue bautizado, nacía sin mayores pretensiones que transmitir los conocimientos gastronómicos de su madre. Cinco años después es el principal canal en español dedicado a las recetas de cocina en ese gigante universal que es Youtube, con más de 1,3 millones de seguidores. Para que se hagan una idea de las dimensiones del éxito de esta familia chiclanera, el televisivo y reconocido chef Alberto Chicote solo cuenta en su canal con poco más de 100.000.
A Mery —no María ni Mary— el éxito reconoce que le ha llegado casi sin darse cuenta. “Para mi es como si no hubiera pasado el tiempo. Me he ido poco a poco adaptando, aunque es verdad que la vida me ha cambiado una barbaridad”. Y es que ya no solo la paran sus vecinos de Chiclana, sino prácticamente en toda España, ya sea a para pedirle una foto o simplemente para felicitarla por su canal y por las recetas que difunde. A su madre, que acabó animándose y abrió su propio canal, Cocina con Carmen, que ya roza los 300.000 followers, le pasa tres cuartos de lo mismo. “El otro día fuimos a Barcelona invitados por una marca de electrodomésticos para participar en un showcooking y al montarme en el taxi, al taxista le sonó mi voz y me reconoció. ¡Decía que cocinaba gracias a mi!”.
Pero el éxito de estas dos particulares youtubers no ha nacido de la noche a la mañana. Cocina para todos nacía de manera un tanto rudimentaria, con un vídeo con poca calidad de imagen y en el que primaba la improvisación. Mery explicaba cómo hacer una masa para creppes y su hermano Juan Manuel se puso detrás de la cámara. Pero se dieron cuenta que si querían triunfar, debían hacer algo más profesional. Tardaron sobre un año en volver a subir una receta. Juan Manuel, ya con conocimientos de fotografía y edición de vídeos y con una cámara más profesional, se ponía al frente en este apartado, encargándose también de los guiones. Mery y su madre, por otro lado, se encargaban de seleccionar las recetas que, pensaban, tendrían mayor éxito entre el gran público.
“Al principio subíamos una receta día sí, día no, pero era insostenible y la calidad se resentía. Ahora hacemos dos o tres a la semana, grabamos el vídeo, luego planos de mi rostro y de las manos y el audio aparte”, explica Mery para destacar la profesionalización que han ido consiguiendo a lo largo de los años. Su canal ya roza las 500 recetas, siendo la más vista la de la tarta de galleta oreo sin horno, con más de 10 millones de visualizaciones. “La repostería es lo que más me gusta y lo que mejor se me da”, explica, añadiendo que una de sus referentes en este sentido es Alma Obregón.
¿Cuál es el secreto del éxito de estas dos chiclaneras? Está claro que la simpatía que transmiten, ese aje andaluz, hace mucho. Pero también el hecho de que cualquiera que no haya cocinado en su vida pueda preparar un sabroso plato, explican. “Muchas son incluso para niños, porque son fáciles y rápidas y además los ingredientes son asequibles para todo el mundo”, señala Mery. Su madre, que empezó subiendo platos más contundentes, como los típicos potajes de tagarninas —“los hacía en ollas grandes, ahora ya hago platos para cuatro personas”— también destaca la sencillez de sus platos. “Entrando en mi canal puedes hacer lo que quieras. Además, mi hijo, que es el que hace los guiones, me hace explicar las recetas para que las entienda hasta el que no tiene ni idea de cocina”.La popularidad y su más de millón de fans ha permitido a Mery y a su hermano dedicarse profesionalmente a Youtube. Empresas de alimentación y de electrodomésticos patrocinan muchos de sus vídeos para que incluyan sus ingredientes o mencionen sus productos. Incluso distribuidoras de películas les piden que hagan platos temáticos basados en alguno de sus últimos estrenos. En televisión Mery ya ha participado en Canal Cocina, en el popular Masterchef o en Deja sitio para el postre de Cuaro. Y el pasado año, Anaya editó el libro de Cocina para todos, que está a punto de agotar su primera edición. “Estuve en las ferias del libro de Madrid y Barcelona y era increíble ver las colas que se formaban de personas que querían que les firmase el libro”.
Aún están muy lejos de fenómenos de Youtube como El Rubius, con nada menos que 25 millones y medio de seguidores, pero Mery y Carmen no buscan esos números, sabedoras de que su público es muy diferente. De momento aspiran a cosas más modestas, como poder costearse un local adaptado, en donde grabar en el futuro sus vídeos para abandonar la cocina de su casa. Y Mery, como gran repostera, no deja de lado su idea de abrir también una pastelería. Pequeños grandes sueños para dos mujeres que ya han cumplido el principal: triunfar en lo que más les apasiona.
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