Investigadores de la Universidad Meiji de Japón junto con la empresa de bebidas 'Kirin Holdings' han creado los primeros palillos chinos eléctricos capaces de aportar sabor salado a la comida. El objetivo de este invento es el de ayudar a quienes los usen a reducir el consumo de sodio (principal componente de la sal) para hacer más saludable su alimentación.
El funcionamiento de estos palillos es realmente sencillo, ya que utilizan débiles descargas eléctricas para transmitir iones de sodio directamente a la boca. De esta manera se puede evitar utilizarla directamente sobre los alimentos manteniendo su sabor. Según ha explicado Homei Miyashita, líder del proyecto, "las descargas eléctricas proporcionan una sensación de salinidad que mejora 1,5 veces el sabor en la boca".
Asimismo, aseguran que los estímulos emitidos al ser tan débiles son imperceptibles para el cuerpo humano. Los palillos llevan adherida una batería que se coloca en la muñeca a modo de pulsera. Ella es la encargada de emitir las ondas cuando detecta que se está sujetando la comida. Aún está en fase de desarrollo, pero esperan tener listo el dispositivo para 2023 y poder sacarlo al mercado.
La comida japonesa tradicionalmente se basa en sabores salados, de hecho, según la OMS un adulto japonés consume de media unos 10 gramos de sal al día, el doble de lo que aconsejan. Así pues, este dispositivo podría llegar a ser relevante en la gastronomía nipona en un futuro próximo. Por otro lado, también podría ser relevante a la hora de ofrecer dietas bajas en sodio a personas con problemas de tensión.
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