Alberto Herrera y Blanca Llandres se han casado este sábado en la Basílica Menor de Nuestra Señora de la Caridad, en Sanlúcar de Barrameda, en una ceremonia celebrada bajo un cielo despejado y rodeados de familiares y amigos. El enlace ha tenido lugar pocos meses antes de que ambos se conviertan en padres por primera vez, culminando así una relación que se inició en 2023.
La pareja ha mantenido su noviazgo con discreción durante los primeros meses, aunque su relación ha salido a la luz recientemente, coincidiendo con el anuncio del embarazo de Llandres. La boda ha supuesto también la unión de dos familias que comparten una estrecha amistad desde hace años.
Blanca Llandres es hija del biólogo y divulgador científico Carlos Llandres y de Blanca Parejo, directora de la Fundación Alalá. Su familia mantiene vínculos con figuras conocidas del ámbito social y cultural, entre ellas Lourdes Montes y el cantante José Manuel Soto, cuya esposa es tía de la novia. Estas relaciones han reforzado los lazos familiares en torno a la pareja.
La emoción de Carlos Herrera
Carlos Herrera, padre del novio, ha llegado al templo acompañado de su esposa, Pepa Gea, y se ha mostrado visiblemente emocionado. Poco después ha hecho su aparición el novio, del brazo de su madre, la periodista Mariló Montero, quien ha ejercido de madrina y ha lucido un vestido en tonos azules.
La novia ha confiado en el diseñador sevillano Nicolás Montenegro para su vestido, un modelo adaptado a su embarazo y confeccionado con la colaboración de su cuñada, Rocío Crusset. Por su parte, Herrera ha apostado por un traje clásico del sastre Tomás Laso-Argos y ha saludado con cercanía a los invitados a su llegada.
Tras la ceremonia religiosa, Carlos Herrera ha expresado su orgullo por el enlace de su hijo y ha destacado la emoción que se ha vivido durante el acto. Ha señalado que el novio se ha conmovido al ver entrar a su esposa en la basílica y ha descrito la boda como una de las más hermosas a las que ha asistido. También ha manifestado su alegría por la próxima llegada de su primer nieto, un acontecimiento que la familia espera con entusiasmo.


