Si vais a matar al niño, dádselo a Yolanda

Se dilapida así a Unidas Podemos para construir otra unidad que lo primero que hace es destruir a la madre real, con el argumento que no suma

Yolanda Díaz e Irene Montero se dejaron fotografiar juntas el 1M.
Yolanda Díaz e Irene Montero se dejaron fotografiar juntas el 1M.

Corrían los tiempos del rey Salomón, que sucedió a su padre David y, consciente de su falta de preparación para gobernar el heredado reino unificado de Israel, buscó ayuda en el todopoderoso Dios para desarrollar un buen gobierno, le pidió sabiduría para gobernar con justicia al pueblo. Llegado un momento crucial, debía decidir cuál de las dos madres que se postulaban como la auténtica de un niño era la real. Ante la imposibilidad de discernir quien era la verdadera, dispuso partir por la mitad al niño. Súbitamente dijo una de las madres, dáselo a ella y así supo quién era la madre real. 

Pasemos ahora, a la Pax Romana, también conocida como la Pax Augusta, que constituyó el mayor y mejor periodo de estabilidad del imperio romano, tanto por su calma interior como por su seguridad exterior, que se consiguió no por exterminar al vencido, sino por su integración y desde el respeto a sus costumbres y gobiernos. El esplendor económico fue cierto y duradero, favoreciendo la colaboración entre pueblos, incluso, antagónicos. La Pax Romana acabó con la muerte de Marco Aurelio que le sobrevino en compañía de su hijo, Cómodo (ahí lo dejo, porque hay varias versiones de cómo murió el emperador), designado por aquél para sucederle, literalmente un paranoico egoísta descerebrado. Recibió un legado que funcionaba, no para destruirlo, sino para mejorarlo, sin embargo, lo sumió en el caos. 

Pues bien, trasladando esto a nuestros días, vemos gran similitud con la destrucción de Unidas Podemos, que se le entregó a Yolanda Díaz como sujeto político activo y consolidado, vivo. Que se le cedió no para dinamitarlo, sino para ensancharlo, mejorarlo, integrando en él a otros actores políticos que ayudaran configurar una izquierda transformadora preparada para gobernar, no sometida a lo que se conoce como régimen, que sirviera de vehículo para mejorar nuestra democracia, haciéndola más útil y participativa, caminando hacia una sociedad más justa e igualitaria, practicando una política al servicio de las personas y no al servicio de intereses determinados. 

Al poco de la designación, la legataria que no repudió la herencia, refutó a Unidas Podemos con el mantra de que los partidos y sus aparatos eran nocivos para construir, naciendo así el espacio de escucha Sumar. El legado ha sido sustituido por el partido Movimiento Sumar que mata a Unidas Podemos, sumiendo en la confusión al electorado de izquierdas. Aquí no hay nada inconsciente, o yo no lo sabía, o quien hubiera pensado. A esto hay que unir la inocencia y la bondad de los líderes de Podemos, a la vez, mil y una veces traicionados. De esto se aprende, sin lugar a dudas.

Se dilapida así a Unidas Podemos para construir otra unidad que lo primero que hace es destruir a la madre real, con el argumento que no suma. ¿cómo? Pero si esa madre es la que ha conseguido los más importantes cambios legislativos donde millones de personas han salido favorecidas, impidiendo que muchas de ellas se situaran en riesgo de exclusión social o al borde de la quiebra económica.  ¿O es que alguien en su sano juicio político cree que el PSOE con Cs o en solitario hubiera hecho esas transformaciones económicas y sociales de progreso? ¡Es injusto!

A lo anterior, Movimiento Sumar, se supone que, liderado por Yolanda Díaz, suma vetos personales, como los de Irene Montero o Pablo Echenique. Ciertamente el concepto sumar ha sido cambiado de raíz. Esto todos lo niegan si se les pregunta de cara, pero los hechos son testarudos e imponen otra realidad. En este trance, Podemos llama a consulta a su militancia y en unas horas más de cincuenta mil personas respaldan a su dirección para que asegure la obligada unidad, lo que deja desautorizadas a las voces discrepantes que aseveraban el desapego hacia la dirección del partido y señala la magnitud de la diferencia de militancia activa respecto de otras organizaciones que “suman” en Sumar. 

Llegados a este punto y con todo, la madre real, consciente de que de ella pende la responsabilidad de la vida del niño Movimiento Sumar, inmediatamente, con  imposición de los vetos como condición ¡de unidad!, lo que constituye un gravísimo error y un regalo a la extrema derecha (derecha no hay) y la injusticia del acuerdo que se ofrece, mira a los ojos a los sumadores, Salomón, en este caso como en otros, está de perfil, es más Cómodo, y les dice con firmeza y dignidad: Si vais a matar al niño, dádselo a Yolanda. Esa es la grandeza de Ione e Irene.

 

Archivado en:

Si has llegado hasta aquí y te gusta nuestro trabajo, apoya lavozdelsur.es, periodismo libre, independiente y en andaluz.

Comentarios (1)

Pepe Hace 10 meses
Derecha si hay, su nombre es PSOE. La "izquierda" tibia, siempre regala a la derecha el tablero.
Lo más leído