El cronista tenía idea de hacer un balance de la Feria del Caballo –no de la suya, pese al importante ‘trabajo de campo’ realizado— pero echando un vistazo por internet se ha encontrado con que el teniente de alcaldesa del ramo, Francisco Camas, ya ha hecho un balance en el que se ha apresurado a calificar la edición de 2018 como “histórica”, así que poco queda por añadir. Cuando un político usa esta palabra ya, a partir de ahí, solo queda emplazar al lector a un próximo artículo. Pues nada, son las 18:20 horas del lunes, así que, buenas tardes, lector…
…No, un momento, cuando definitivamente va a cerrar el artículo –en serio que pensaba hacerlo— el cronista ha vuelto a echar un vistazo a internet y ha descubierto que también la alcaldesa, Mamen Sánchez, ha hablado de la Feria de 2018 y se ha referido a la misma como “histórica”, así que a las 18:30 horas ha vuelto sobre el artículo, y hala, aquí queda reflejada dicha opinión. De nuevo hay que recordar que cuando se utiliza el término “histórico” poco queda por añadir salvo desear buenas tardes al lector y emplazarlo a una próxima cita, previsiblemente el próximo jueves.
Tal vez ese día, solo tal vez, pudiéramos reflexionar sobre algunas cuestiones de esta Feria “histórica”, como por ejemplo de la periodicidad del servicio público de autobuses que conecta con el Real, evidentemente más escaso que en el de citas anteriores, sobre todo durante el día, con auténticas aglomeraciones en plaza Esteve y buses tan llenos que a veces ya no abrían en las siguientes paradas.
Podríamos hablar también de los cientos de familias que fueron el domingo con los niños a los cacharritos y se encontraron con que no funcionaban, pero ya llegará el jueves.
¿Desde cuándo se puede volver a fumar dentro de las casetas? Alguien podría decir algo al respecto…
¿Porque no se visan los precios de las casetas? Dicho de otra forma, ¿por qué los dos o tres últimos días hay algunas casetas que suben los precios? Al menos los caseteros podían molestarse en modificar la carta y sus precios… También lo dejamos, si acaso, para el jueves.
De la defensa de la música ‘tradicional’ también habría que hablar. Sevillanas, rumbas, bulerías… y el reguetón, ese nuevo palo de Jerez y los Puertos.
Me encanta la celeridad con la que se limpia el parquecito del botellón. El cronista reclama la misma prestancia para su calle…
Pero todo esto será el jueves, cuando se enfríen estos días “históricos” que hemos vivido, días que antes se calificaban simplemente como una buena Feria, haber vivido una buena Feria, por el clima, por la asistencia, por la estética habitual (y la aportada por la Guardia Real), pero eso ya, tal vez…
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