El Ayuntamiento de Jerez ha nombrado a tres asesores o cargos de confianza, como se les quiera llamar. Se trata, lógicamente, de gente del PSOE, que se ha elegido directamente, con lo que el ejecutivo local presidido por Mamen Sánchez nos ha privado de presenciar un numerito como el del proceso de selección para trabajar en el grupo municipal llevado a cabo en Cádiz por el equipo que dirige José María González, Kichi.
Conozco personalmente a los tres asesores. No voy a dar más pistas, pero la relación que tengo con ellos se puede resumir de manera sucinta así: con ‘uno’ me saludo parándome a charlar dos o tres minutos; con ‘dos’ cruzo un “hola qué tal”, “bien, bien, tirando, ¿y tú?”; y con ‘tres’ un hola a secas con ligera inclinación de cabeza. Casualmente, la opinión, digamos, profesional o de capacidad que tengo de cada uno de ellos coincide con el grado de trato que tengo con los tres. Una casualidad, insisto.
Hay gente a la que le parece bien este nombramiento y hay gente a la que le parece mal. A mí, aunque al principio se dijo que no iba a haber nombramientos de este tipo, simplemente me parece normal. Mamen Sánchez gobierna muy en precario después de sacar siete concejales y ceder uno –una, en este caso- a Diputación, por lo que veo normal que el PSOE, después de la negativa de Ganemos a entrar en el gobierno municipal, tire de ‘fondo de armario’ para repartir tareas y aliviar el volumen de trabajo de su reducido número de concejales. Durante varias semanas han sonado otros nombres, algunos de relumbrón, e incluso a alguno de ellos se le ha visto salir de alguna delegación o compartir una bebida con la propia alcaldesa en la plaza Plateros, auténtico cenáculo político estos días.
Con todo, lo más significativo de este nombramiento es precisamente el silencio de Ganemos hacia el mismo. Se trata de un silencio que denota, sobre todo, que PSOE y su principal aliado –por número de votos- han hablado durante este tiempo mucho más allá del puñado de folios, poco más que una declaración de buenas intenciones, al que en su día dieron calidad de acuerdo de investidura para facilitar solo la elección de Mamen Sánchez. Está claro que Ganemos, al menos, entiende el nombramiento. El mandato de Sánchez poco a poco arranca y es preferible para la gestión municipal que PSOE y Ganemos lleven los temas clave ‘masticados’ y si hay puntos de fricción o conflicto, mejor verlo/resolverlo antes. Otra cosa es la opinión de los simpatizantes y votantes de Ganemos sobre este asunto y las explicaciones que puedan exigir en sus foros…