Siempre me ha sorprendido el analizar las aguas residuales para estimar el consumo de sustancias estupefacientes en poblaciones, donde nos delata el cuarto de baño sin excepción. Para niveles de covid, también.
Ante temperaturas cálidas extremas, baja el consumo en restaurantes y sube en farmacias, información estratégica para inversores obtenida a través del uso de tarjetas de pago. La estimación de asistencia a la Feria de Sevilla, por día, se realiza en base a la basura generada retirada por Lipasam. Creo que habría que repensar el éxito, en claves más limpias.
Las redes sociales, buscadores de noticias y recomendaciones, además de incitar a seguir conectado, utilizando información sin contrastar o peor aún, sabiendo que son medias verdades o plenas falsedades, parece que están relacionadas con la menor conciliación, cordialidad y capacidad de diálogo.
El tráfico es un escenario donde se hace patente el estado de la sociedad movilizada sobre motores de combustión mayoritariamente, entre atascos y polución, no siendo el mejor medio para desarrollarnos. Un alto mando de la Guardia Civil, ya hace años, se trasladaba en bicicleta a reuniones en la ciudad de Sevilla.
Los excesos se manifiestan a corto, medio o largo plazo, aunque la memoria sea selectiva y olvide a los que se ha sometido al cuerpo humano en plena juventud y no tanta. No hay mejor análisis que el conocerse a uno mismo, comiendo con moderación y sabiendo que el cementerio está lleno de conductores que creían llevar la razón.
Existen muchos tipos, sintáctico, cuantitativo, cualitativo, factorial, espectral, químico, técnico, de mercado o clínico, de suma importancia para la toma de decisiones, aun sabiendo que podemos llegar a la parálisis por el análisis.