Ya han pasado…

Con pesar ante tan emotivo gesto, debo llevar la contraria a estos valientes periodistas; y es que por mucho que a algunos nos guste cantar el Bella Ciao, llevamos mucho tiempo dejando pasar al neofascismo

Ya han pasado…. Acto de Vox en Jerez hace unos meses.
Ya han pasado…. Acto de Vox en Jerez hace unos meses. MANU GARCÍA

Dijo ayer el presidente del Partido Popular europeo, el bolivariano  Donald Tusk, que el PP en España ha claudicado ante la extrema derecha de VOX. Pobre hombre, a lo mejor creyó que aquí, el mal llamado centroderecha lo era realmente. ¡Vaya debut el del centrado Feijóo! Bronca del jefe europeo y ridículo de los tuyos  intentando relacionar una y otra vez, a Putin con Unidas Podemos y, por ende, con Belcebú encarnado en Pedro Sánchez. La verdadera ideología del asesino dictador ruso consiste en el viejo truco de camuflar autoritarismo y dinero bajo una bandera. Para ello, Vladimir ensalza la Rusia de los Zares, el autoritarismo soviético, la religión, las políticas antifeministas y rechaza todo lo que huela al colectivo LGTBI. Hombre, sacado del programa político de Podemos no parece. ¡Cómo será la cosa que incluso en el pueblo polaco de Przemysl, en la frontera con Ucrania, un alcalde ultranacionalista  recriminó a  Salvini su antigua amistad con Putin! Flipando se habrá quedado Abascal viendo el video de lo sucedido a su querido amigo Matteo mientras él corre a borrar toda rastro de  frase o foto comprometedora en Twitter, no vaya a ser que le pase lo mismo ¡Ay, Santi! ¿quién es el de la derechita cobarde ahora? Si vas de chulo neoliberal, al menos haz como Trump que no se arruga por un genocidio de más o de menos.
Tampoco enseñéis a los que llaman comunista a Putin el vídeo de los trabajadores de Dozhd, televisión opositora al régimen ruso, que cesaron sus emisiones al grito de los republicanos en la Guerra Civil: “No pasarán”. Pero, con pesar ante tan emotivo gesto, debo llevar la contraria a estos valientes periodistas; y es que por mucho que a algunos nos guste cantar el Bella Ciao, llevamos mucho tiempo dejando pasar al neofascismo. Pasaron, pasan y pasarán.

Los Putin de turno pasan cada vez que el primer mundo hace negocio con regímenes asesinos. Pasan, cuando nuestros gobiernos, vendidos a las multinacionales, compran su petróleo o su gas. 

Pasan, ocultos tras leyes que hablan de “ofensa a los sentimientos religiosos” o de “injurias a la corona”. Pasan, cuando permitimos a la religión inmiscuirse en la educación.

Pasan, cada  vez que gobiernan aquellos que hacen negocios salvajes con las necesidades sociales básicas. Pasan, cuando tu hermano se trinca una comisión indecente y, encima, tienes a miles de ovejas demostrándote su apoyo bajo el balcón de tu despacho pagado con dinero negro.

Pasan, mientras haya jueces de ideología antidemocrática. Pasan, mientras se permita a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado “flirtear” con la extrema derecha. Pasan, cuando la policía es utilizada para desahuciar a familias de sus casas.

Pasan, cuando se vota a un “elegido” que agita un trapo. Pasan, cada vez que alguien dice que aquí hace falta un “tío que ponga orden”.

Pasan, cuando los partidos políticos no son honrados y no castigan la corrupción. Pasan, mientras en la izquierda haya un sector de nostálgicos que vanaglorien a Corea del Norte o la URSS

Pasan, cada vez que Belarra o Montero hablan de una falsa paz, cobrando como ministras del mismo gobierno al que critican. Pasan, cuando el líder de un partido que llegaba para cambiar los vicios de la “vieja política” se compra un casoplón.

Tranquilos, que hoy hay para todos. Pasan, cuando en la camiseta de tu equipo se hace publicidad de un Emirato o se juega la Supercopa en Arabia.

Pasan, cuando futbolistas lamejeques van a entrenar a Qatar mientras critican la democracia en España. Pasan, cuando las audiencias suben con los programas conspiranoicos de Iker Jiménez o cuando llevas al líder de la extrema derecha “a divertirse al Hormiguero”.

Pasan, cada vez que alguien comienza una frase diciendo “Yo no soy machista, pero…” Pasan, cuando a tu cuñado le “jode” que se celebre en tu ciudad el Día del Orgullo Gay o el 8M. Pasan, cuando le ríes las gracias a tu vecino que “es muy facha pero buena gente”. 

PASAN, cuando no nos interesa la política o cuando no vamos a votar “porque todos son iguales”.

Por favor, no hagamos que la historia se repita: 

NO PASARÁN...si no les dejamos que pasen.

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