Hoy queremos expresar la importancia y necesidad de que funcione la UNIDAD DE CUIDADOS PALIATIVOS A DOMICILIO para toda aquella persona que quiera morir con dignidad en su domicilio rodeado de familiares y amigos queridos.
Últimamente hemos vivido una experiencia con un ser muy querido, que expresó su deseo de quedarse en casa hasta su último momento, sus familiares así también lo quisimos, pero teníamos el temor de que nuestro deseo no fuese el correcto, por estar oyendo eso de “yo creo que en el hospital le atenderían mejor”. Viendo la evolución de la enfermedad, nos dimos cuenta de que no estábamos equivocados, y que realmente hicimos lo correcto, gracias sobre todo al apoyo del grupo de profesionales de cuidados paliativos a domicilio que nos estuvo atendiendo durante todos estos malos momentos.
Por ello queremos hacer ver la importancia de que una persona que desea quedarse en casa hasta que llegue su momento de partir, lo pueda hacer, sabiendo que va ha ser atendido, no digo igual, sino mejor que en el hospital. Con ello no quiero menospreciar la atención que te prestan por parte de paliativos en el hospital, ni a esa quinta planta, para la que, por el contrario, solo le tenemos palabras de agradecimiento.
Todo esto se puede llevar a cabo teniendo, como nosotros hemos tenido, el apoyo de un equipo médico cómo el de paliativos que nos atendió, y desde aquí queremos dar las gracias inmensas a Laura, José Luis, Carmen, Diego, a todos los que forman parte del equipo de paliativos a domicilio.
Y a nivel personal, Laura y José Luis: gracias, mil gracias por todo, por haber elegido una profesión que realmente es la vuestra, generosa, altruista, solidaria, empática, como sois vosotros, en resumen “buenísimas personas”.
Por último, recordar cuando llegábais a casa, casi a diario, hablabais con Andrés y él, con sus pocas fuerzas, esbozaba esa media sonrisa y os hacía el gesto del dedo pulgar hacia arriba, se alegraba de veros siempre, y vosotros le hablábais con ese cariño y ternura. Por ello, creo que no nos equivocamos si os damos las gracias también por él, ya que él desgraciadamente ya no está aquí para hacerlo.
Un fuerte abrazo para ti Laura, para ti José Luis, para todo el equipo de paliativos a domicilio, y seguid siendo como sois.
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