Ángel del Castillo González es ante todo una persona buena de corazón. Este alcalareño de 27 años no conoce la maldad y da las gracias a quien lo merece. Cuando se publique este artículo, la noche del Viernes de Dolores, llevará un par de horas procesionando con el Cristo de la Corona de su pueblo. El día antes, nada más vernos en La Plazuela de Alcalá de Guadaíra, exclamó con total ilusión: "¡Ay, Dios mío, que mañana salgo de nazareno!". Para seguidamente advertir que pensaba ponerse la túnica desde las 12 del mediodía.
Son las 11 de la mañana y Angelito –como es popularmente conocido, seguido o no de su apodo 'el aguaó– no para quieto en una céntrica plaza del pueblo, donde están montando las vallas de la carrera oficial de Semana Santa. Mientras andamos hacia la Parroquia de San Sebastián, asegura encontrarse "muy bien, pero muy nervioso". Son dos años sin su fiesta grande, sin su pasión, sin el modus vivendi de este joven que supura fervor cofrade por los cuatro costados, los 365 días del año.
Durante el camino recuerda el pregón de Semana Santa de Sevilla. "Fue inmenso, me quedé sin palabras", asegura llevándose los dedos a la boca en señal de buen gusto. Angelito dice ser el "defensor de los cofrades" y así lo entiende su gente. "En Sevilla todo el mundo se quería hacer fotos conmigo y me decían: Ahí va el defensor cofrade", recuerda con sumo orgullo.
En ese instante tienes dos grandes preocupaciones: que no llueva el Lunes Santo y encontrar a alguna persona que lo abrace en la puerta de la parroquia hacia la que nos dirigimos. "Parece que el martes va a ser el peor día, si llueve tampoco pasa ná, pero yo le pido a la gente que le lleve huevos a Santa Clara para que no llueva, por favor, que le lleven huevos a Santa Clara", repite cruzando sus manos y mirando al cielo.
¡Bernardo, Bernardo!, comienza a gritar sobre las escaleras de la parroquia. "Venimos a hacer unas fotos con la Virgen –la Señora de la Hermandad del Dulce Nombre–", comenta en la entrada. –"Claro, pasad sin problemas. Oye Angelito, no paras, ¿eh?", le responde afectuoso Bernardo, que anda con los últimos preparativos. "No, no, no. Este año salgo con la Virgen de la Aurora de pavero", replica veloz. Angelito se persigna nada más entrar en el templo y atenúa su sonrisa. El respeto y la admiración son notables en territorio cofrade.
Una vez fuera de la parroquia, comienza a hablar de sus raíces. "Mi familia es bastante cofrade y mi madre fue la que me inculcó ser nazareno", comenta. "Ella está orgullosa de que yo sea el defensor de los cofrades", añade sonriente. Este joven, aunque nacido en Alcalá, se siente más vinculado a Sevilla y Mairena del Alcor. El motivo no es baladí: "Me llevo muy bien con los cofrades de mi pueblo, pero no saben valorarme tanto como en Mairena o en Sevilla, donde recibo más de lo que doy”.
La Semana Santa definida por Angelito es tal que así: "La alegría, la explosión de júbilo que llevamos todo el año preparando, es un fervor popular, la religiosidad, es hacer pública la manifestación de fe en nuestras calles". Su itinerario comienza hoy, Viernes de Dolores y concluye el Domingo de Resurrección, entre Sevilla, Alcalá, Utrera, Mairena y Córdoba. "Salgo todos los días: Cristo de la Corona, Los Afligidos, La Borriquita, Estudiantes de Utrera, Tercera Palabra, Soberano, Jesús Nazareno, Los Servitas y El Resucitado", enumera casi a ritmo de autómata.
Sorprendida, le pregunto cómo aguanta y se prepara tamaño festival de 10 días. "Tomando vitaminas y haciendo audios para despertar a la gente, diciéndole que esto ya está aquí, que hay que sacar las túnicas, los capirotes y que las mujeres se vistan de mantilla. Porque el nivel de mujeres de mantilla ha bajado notablemente y yo quiero animar desde aquí a las mujeres a que se vistan de mantilla", aprecia emocionado.
Al igual que algunas personas admiran a cantantes, actrices o futbolistas, Angelito tiene vírgenes, párrocos y capataces. "Me voy a mojar un poquito –dice algo tímido– mis favoritas son la Virgen de los Remedios Coronada, patrona de Mairena del Alcor, mi Virgen de la Aurora de Sevilla que quita el sentío y María Santísima de la Ancilla". Y añade a su particular listado capillita: "Don David Lerrén de Mairena del Alcor es mi párroco favorito, destaco a mi amigo Manolo Chanca, catalogado como uno de los mejores capataces del mundo entero y la banda de música María Santísima de la Victoria de Las Cigarreras, que es una banda que toca con el alma, con el corazón, con la fe y con los sentimientos".
Una pandemia que no dejó salir a los cofrades a la calle
En marzo de 2020 el mundo se paró y Angelito no imaginaba una vida sin Semana Santa. "Lo pasé fatal y empecé a hacer audios para que a la gente se le hiciese todo un poquito más ameno", asegura el alcalareño, que dice que a día de hoy, no se cansa. "Yo sigo y sigo, lo hago desde el corazón", arguye el ejecutor de la mítica frase "Cofrades a la calle", que sigue siendo viral y de total actualidad, dos años después. "Se ha convertido en un lema y yo me siento orgulloso de ello", sentencia durante un paseo por el centro de su pueblo.
Bien bien bien, pero fatal fatal fatal...Contad conmigo para todo... Bastante mejor, bastante mejor...¡Sevilla, despierta, que tenemos que recuperar lo nuestro! Tengo muchas ganas de veros... El cuento de los niños cofrades Reyes y Fernando... O bastante bien, pero un poquito jarto de llorar resuenan ya en la retentiva colectiva, debido al alcance de sus mensajes de ánimo, felicitación, lamento e incluso publicitarios.
A lo largo de nuestro paseo, Angelito nos enseña su mascarilla personalizada con el famosa lema. "Tenemos camisetas, mascarillas y tazas hechas por Costales 'El mosca', en calle Javier Lasso de la Vega, y otro modelo de Camijetas en la tienda de calle Águilas de Sevilla", promociona su creador, que también aparece en El increíble robo del informe "Rinconcillo", la última novela del periodista y escritor Julio Muñoz Gijón (Rancio Sevillano).
La siguiente y última parada nos lleva a la capilla donde está la hermandad más antigua del pueblo, la del Santo Entierro. Antes, Angelito se para en el escaparate de temática cofrade de la diseñadora de moda Desiré Vega y saluda como un político en campaña. De camino a la capilla se autodefine como "polifacético" y lanza un llamamiento a las bandas de música para decirles que le gustaría tocar el bombo. No es suficiente con aguaor, nazareno, pavero o acólito. Angelito vive una Semana Santa de 360 grados a excepción de ser costalero. "Tengo muchas ganas de tocar el bombo", insiste tocando las palmas.
"El Domingo de Resurrección me pongo muy contento cuando la virgen de la Aurora entra en Santa Marina, los soles de amargura hasta las seis de la tarde que entra", revela inspirado. –"¿Después de 10 días saliendo en procesión, te llevarás una semana durmiendo, ¿no?, pregunto. "No porque al día siguiente me voy a la romería de la Virgen de la Cabeza de Andújar", responde rotundo este cofrade, que reconoce que las cofradías le ayudan con la adquisición de túnicas debido a su implicación. "Tengo 10 túnicas y una de grillo del Cristo de la Cárcel", afirma.
Antes de acceder a la capilla, admite su gusto por la feria, aunque prefiere la Romería del Rocío. No vayamos a salirnos de los márgenes cofrades, por favor. "La Hermandad del Rocío de Alcalá es una de las mejores y este año voy a hacer todo el camino", sostiene. En este sentido, destaca la figura de María José Gravalosa Morenilla, –a la que le ha dedicado conocidos audios– por ser la primera pregonera de la Semana Santa de Alcalá y presidenta del Consejo de Hermandades. "Tiene un corazón tan grande que no le cabe en el pecho, ella es quien ilusiona a los jóvenes cofrades", expresa con sentimiento.
En el interior de aquella capilla le recibe Joaquín Pérez, un jubilado de las Hermandad del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Nuestra Señora de la Soledad. Angelito muestra su cariño con abrazos de afecto. Joaquín se ríe y dice inmediatamente: "¡Este se lleva todo el día en las parroquias, no tiene remedio, lo mismo te puede salir de armao que de aguaor que de acólito!, bromea.
Después de un rato de charla sobre la importancia de la Semana Santa en la preservación de oficios artesanales como dorador, orfebre, escultor, cerero o ebanista, entre otros, Angelito quiere salir fuera para enviar varios mensajes de cara a esta semana grande para los cofrades "de corazón y de prestigio". Alzando sus manos casi en cruz, clama mirando al cielo: "Por favor, seamos prudentes e invitad a todo el mundo a que le lleve huevos a Santa Clara para que haya una Semana Santa espléndida".
Los minutos pasan y el 'defensor cofrade' aumenta la emoción por momentos, pero la hora de despedirnos llega, no sin antes agradecer la visita en varias ocasiones. Así, concluye con el poderío que le caracteriza: "¡Cofrades! Sacad las túnicas, sacad las mantillas, sacad los costales, que nos vamos a al calle, que esto ya esta aquí; cofrades a la calle, cofrades de verdad, vámonos a la calle, cofrades, gente buena de verdad".
Angelito se muestra positivo. Este año, los cofrades sí estarán en la calle.
Comentarios