Ticksy es un juego de palabras con ticket y easy —fácil en inglés—. Es el nombre que eligió el jerezano Fede Rivas, CEO de la startup, para un proyecto que buscaba expresamente eso: hacer de la facturación algo muy sencillo.
Todo empezó con las bromas que el emprendedor hacía a un amigo, encargado de llevar software en negocios de hostelería. "Me reía un poco. Le decía: ¿Cómo pueden ser tan feos los TPV —Terminales Punto de Venta—? Creo que nadie había pensado en la gente que lo usaba", dice durante la entrevista con lavozdelsur.es. Fede, que había trabajado como freelance en programación y producción, venía del mundo del hosting y asesoramiento web, bajo la creación de su otra empresa en 2005, Pixerama.
"Quería hacer algo de producto, dedicarme solo a una cosa, hacer algo que tuviese mucha calidad", recuerda sobre el comienzo de la iniciativa. Uno de los días que se encontró con su amigo, se le encendió la bombilla: "Cada vez que lo veía, pensaba que era un producto anticuado, que tenía un desfase de quince años. Entonces, pensé: ¿Por qué no nos animamos a hacer uno nuevo?". Tras sondear y estudiar la competencia, Fede percibió que había nicho de mercado y que los hosteleros buscaban un sistema de pago más moderno. Así se inició en el mundo de los TPV, en el que lleva ya unos cinco años.
Ticksy centraliza todo lo que un bar o restaurante hace en una sola plataforma, y sirve tanto para las comandas que se realizan en el negocio in situ, como para el servicio a domicilio o delivery. "Normalmente cuando vendes a domicilio y quieres estar en varias plataformas, como Just Eat, Uber, Glovo o Deliveroo, te ponen cuatro o cinco cacharros. Cada uno de ellos imprime pedidos y te salen tickets de diferentes sitios, que luego tienes que meter uno a uno en la TPV. Si es un sábado noche y tienes 80 o 90 pedidos, acaba siendo una locura", explica.
Es precisamente lo que busca evitar el emprendedor con su app, que aúna todo en una única plataforma. "Un sistema así evita que metiendo tickets tengas un descuadre de caja. Todo el proceso está automatizado, lo que envía un camarero, se imprime y se actualiza en cocina. Igual con el delivery", comenta. La empresa está desarrollando ahora aplicaciones alrededor de Ticksy, una web app y también un plugin de WordPress propio, con la intención de que todos los pedidos tengan el mismo formato.
El objetivo es avanzar hacia la restauración del futuro, con inteligencia artificial incluida, donde los clientes puedan pagar con un código QR sin pedírselo al camarero y los hosteleros conozcan los hábitos de consumo de estos a través un algoritmo que desarrollan.
“Vienen un montón de cosas pensando en facilitar la vida al cliente. Y esto se ha acelerado con la pandemia”, advierte Fede, que cree que en unos años todo se pagará con tarjeta. En ese proceso de avance tecnológico, quienes tienen la de perder son los más pequeños.
“Los grandes tienen tecnología y los negocios de barrio no pueden permitirse el desarrollo de app así. Desde esa perspectiva estamos ayudando al bar de la esquina, estamos intentando democratizar esa tecnología frente a grandes como Burguer King o Domino’s Pizza”. De hecho, con un plan sencillo —el emprendedor llama a su negocio el Netflix de la hostelería—, cualquier restaurante puede “customizar” su carta, poniéndole su logo y fotos personalizables a sus productos.
“Nos metimos en un mercado que es muy difícil de entrar, los softwares son complejos, pero no paramos de crecer”, comenta ilusionado sobre el futuro de la startup. En la oficina de Ticksy, ubicada en el polígono industrial de la calle Oro, no paran de teclear. El equipo que trabaja en el proyecto ha pasado de dos personas a siete en poco más de año y medio.
Tras haber formado parte el pasado año del Programa Minerva para la aceleración de proyectos tecnológicos y haber quedado finalista de los premios Andalucía Emprende, busca consolidarse, en un mercado en el que tiene clientes desde Jerez a Barcelona pasando por Córdoba y Málaga. En enero darán el salto a Latinoamérica, instalándose en República Dominicana y Perú, y ya han firmado un acuerdo con la plataforma de pago CM.
Su caso de éxito lo resume un cliente norteamericano de la vecina localidad de Rota. “No se creía que fuéramos de Jerez. ¿Cómo podéis estar aquí?, nos dijo. Llevaba años buscando una plataforma nueva y moderna, y no la encontraba”, dice. El resto, lo hace el marketing y el boca a boca. Los camareros que trabajan con la app y cambian de negocio, lo reclaman en el nuevo. Ticksy, o cómo democratizar la hostelería.
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