ICCS Contact Center anunció un ERE para 217 familias sevillanas el pasado Viernes de Dolores. La compañía, que emplea a 600 trabajadores del sector, cuenta con oficinas en Sevilla, Málaga y Cali (Colombia) y tiene más de 15 años de experiencia en el negocio.
El 26 de marzo, la plantilla del programa de fidelización de Orange recibió mediante correo electrónico o personalmente el anuncio de la intención empresarial de iniciar un despido colectivo por finalización de la obra prestada para la compañía de telecomunicaciones de Orange, afectando a un total de 217 familias de la ciudad.
Esta empresa sevillana carece de representantes legales, ni comité legitimado, pero aun así la medida anunciada por la empresa iba acompañada con un correo electrónico de una organización concreta, excluyendo al resto de organizaciones sindicales con representación en el sector e incluso excluyendo a la sección sindical constituida, legalmente, en el centro de trabajo, como es el caso de CNT.
CGT Sevilla, ante las diversas irregularidades que le ha manifestado su afiliación, comunicó a la dirección de la empresa su punto de vista legal, e instó a ICCS que realizara una convocatoria abierta a la plantilla para que votara democráticamente a sus tres miembros en esta mesa negociadora que deberá constituirse de la forma más garantista y transparente, y no como se estaba llevando a cabo esta situación hasta entonces.
CGT y CNT cree que la empresa tiene capacidad para reubicar a las 217 familias afectadas, ya que han obtenido, recientemente, nuevos servicios que están por empezar como es Jazztel. Los sindicatos considera que el ERE anunciado no es más que una forma de abaratar la producción renovando plantilla antigua con derechos adquiridos, jornadas adscritas y consolidadas por personal nuevo, con jornadas menores y más flexibles, para poder conseguir así mayores beneficios.
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