Los estudiantes de Medicina de la Universidad de Sevilla alertan sobre un estado de agotamiento creciente causado por problemas estructurales que arrastra la formación médica en Andalucía. Según explican a lavozdelsur.es, "la infrafinanciación y la mala planificación académica" están afectando directamente a su aprendizaje y bienestar.
"El sistema universitario público está infrafinanciado: faltan profesores, falta infraestructura, faltan materiales y los recursos disponibles no se aprovechan de forma eficiente", señalan. Añaden que la saturación del sistema médico público repercute en la calidad de las prácticas y clases, y limita la formación integral que necesitan para su futuro profesional.
El descontento se centra también en el plan de estudios, que consideran mal organizado y descoordinado: "Hay materias con contenido desproporcionado que reciben horas insuficientes, llegando a tener cinco especialidades en una asignatura cuatrimestral. La falta de coordinación refleja un sistema obsoleto que necesita renovación".
Carteles para que los profesores respeten los 50 minutos de clase
Para visibilizar su malestar, los estudiantes han colocado carteles en las aulas dirigidos a los profesores: "Rogamos, se ciñan a los 50 minutos de clase, de y cinco y menos cinco. Respeten a los alumnos, gracias". Una de las alumnas explica: "Estamos muy quemados con la carrera porque está muy mal organizada en Sevilla. Actualmente, tenemos asignaturas de 12 créditos que incluyen cuatro especialidades —traumatología, neurocirugía, cirugía maxilofacial y urología—, lo que supera con creces todo el contenido que se puede dar en las horas que nos exigen".
"Es imposible que se dé la clase en 50 minutos. Los profesores van al límite intentando dar la clase, y nosotros no podemos descansar, desayunar ni ir al baño. Estamos muy cansados porque este sistema permite que la carrera esté tan mal organizada, y eso tiene que cambiar. Por eso hemos hecho este cartel", continúa su explicación con frustración y cansancio, asegurando que la culpa no es del profesorado, ya que "hacen lo que pueden con el tiempo que tienen".
"El decanato no tiene constancia"
Por su parte, la Universidad de Sevilla asegura que "el decanato no tiene constancia de denuncia alguna en ese sentido, que es el cauce oficial para realizarlas y poder así abordar cualquier incidencia que se produzca".
Los estudiantes reclaman un nuevo plan de estudios, que ajuste las horas a los contenidos reales de cada asignatura y permita una formación coherente y completa. Con la llegada del nuevo equipo decanal, esperan que estas reformas se implementen finalmente.
"Necesitamos una organización coherente y recursos adecuados para recibir la formación digna que nuestra futura profesión exige", concluyen. Su denuncia evidencia la presión creciente sobre las universidades públicas y plantea un debate sobre la necesidad de mayor financiación y planificación académica en carreras críticas como Medicina, que forman a los profesionales encargados de la salud de toda la sociedad.



