El pasado 9 de octubre la Policía Nacional tuvo que emplearse a fondo en la localidad sevillana de Dos Hermanas para reducir a un amplio grupo de vecinos que pretendían acceder al interior de una vivienda del municipio.
El dueño de esta casa, un varón de 56 años, había apuñalado por la espalda con un arma blanca horas antes a otro hombre tras haber tenido una discusión con él. Los agentes se desplazaron hasta la calle Cerro Blanco, donde se había producido el suceso, y atendieron a la víctima, que estaba consciente y cuya vida no corría peligro.
Una vez fue asistido por los servicios sanitarios, los policías acudieron a las inmediaciones de la vivienda del agresor, donde se había refugiado tras el ataque, teniéndola que acordonar ya que una gran cantidad de vecinos se había reunido frente a la entrada en actitud muy alterada e incluso pretendiendo algunos entrar para rendir cuentas ante el individuo.
Una vez asegurado el perímetro, los agentes intentaron convencerle para que saliera de forma voluntaria del domicilio. Al no conseguirlo, intentaron negociar con él para que accediera a colaborar. Finalmente el agresor, que ya contaba con antecedentes, pudo ser detenido y puesto a disposición judicial, tras lo cual se le envió a prisión acusado de un delito de homicidio en grado de tentativa.
Comentarios