La presión de las familias del CEIP San Juan de Ribera, en Bornos, ha vuelto a ponerse sobre la mesa después de que la AMPA Seguir Caminando denunciara públicamente la falta de recursos para atender al alumnado con necesidades específicas. Tras un comunicado en el que explicaron las necesidades de la comunidad educativa, que pusieron por escrito a la delegación territorial de Educación de la Junta de Andalucía, las familias se han reunido en la puerta del colegio para insistir en la urgencia de un refuerzo inmediato.
En el colegio hay 30 niños con necesidades especiales, pero únicamente tres profesionales disponibles para su atención. Una proporción que hace imposible garantizar una intervención adecuada y adaptada a la realidad de cada menor, especialmente cuando se requieren perfiles como AL, PTIS y PT para asegurar un acompañamiento especializado. Lamentan que sus peticiones para reforzar el personal hayan quedado sin atender, pese a que consideran que están defendiendo derechos básicos para un alumnado especialmente vulnerable.
"Estamos muy quemados"
Las familias afectadas señalan que la falta de personal no solo compromete la atención educativa, sino también el bienestar emocional y la seguridad de sus hijos, que requieren apoyo constante a lo largo de la jornada escolar.
En este contexto, las familias tienen previsto solicitar por escrito una reunión con el delegado provincial en la Delegación de Educación de Cádiz, con la intención de exponer directamente la situación y obtener compromisos concretos. Afirman que se trata de un paso necesario ante la falta de avances y de interlocución efectiva con los responsables educativos.
Una de las madres afectadas, Sonia Zarzuela, expresó a lavozdelsur.es el estado de ánimo de buena parte de las familias. "Estamos muy quemados. Esta situación cansa. Necesitamos una respuesta y que atiendan al alumnado del centro como merece", unas palabras que resumen el hartazgo acumulado y la preocupación por el futuro de estos menores.