El sábado 28 de enero será dificil de borrar de la mente de Almudena, de 43 años, y Miguel Ángel, de 47. Este matrimonio de Bornos, municipio situado en la Sierra de Cádiz, sufrió un incidente en torno a las 16.15 horas. Su casa entera salió ardiendo. Él se había marchado con sus dos hijos a visitar a un familiar ingresado, y ella había salido a andar.
De pronto, recibió una llamada que lo cambió todo. "Era mi vecina diciéndome que estaba escuchando explosiones, me dijo tu casa está ardiendo", cuenta Almudena a lavozdelsur.es. En ese momento, avisó a su marido y se dirigieron corriendo a la vivienda.
"Cuando llegamos los bomberos ya estaban actuando porque mi vecina les había llamado, tardaron una media hora porque vienen de fuera del pueblo", relata al otro lado del teléfono. El matrimonio entró en el inmueble, totalmente calcinado.
Cuartos de baño, cocina, habitaciones, salón... Las llamas se habían extendido por toda la casa. "Los bomberos nos dijeron que fue un cortocircuito, pensamos que ha sido por el radiador porque cuando entramos estaba derretido por completo", detalla.
Un trozo del techo del salón se ha venido abajo mientras que las paredes presentan importantes daños causados por el humo. Toda la ropa está "para tirarla" y ningún mueble ha sobrevivido en pie.
"Nos hemos quedado sin sillas, mesas, sofá, todo lo que conseguimos con mucho esfuerzo y muchos días de trabajo", comenta Almudena con tristeza. Afortunadamente, no ha habido que lamentar daños personales y, mientras que todo se soluciona, viven con su suegra.
"No sabemos qué hacer ni para donde tirar, todo esto parece un mal sueño", expresan los bornenses que, tras lo ocurrido, se pusieron en contacto con la asociación Ropero Solidario de Bornos para pedir ayuda. Los voluntarios han difundido el caso en sus redes sociales junto a un número de contacto 627176942 para todas aquellas personas que quieran aportar su granito de arena.
El caso ha llegado a oídos del Ayuntamiento de Bornos, que, según cuenta la familia, se va a hacer cargo de los gastos de la pintura. Además, Cáritas les ha donado 100 euros para la compra de material de limpieza. "La asociación de voluntarios de Bornos está haciendo todo lo posible para ayudarnos", añaden.
Su único deseo es poder volver a vivir en su casa, esa en la que residen desde hace 16 años.
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