La Guardia Civil, gracias a la colaboración ciudadana, ha podido desmontar más de cincuenta metros de trasmallo que estaban colocados a escasos metros de la costa de Chipiona, frente a Costa Ballena. Esta circunstancia supone una supuesta infracción a la Ley 1/2002, de ordenación, fomento y control de pesca marítima, el marisqueo y la acuicultura marina, por la utilización de un arte de pesca de uso profesional sin autorización.
Según fuentes de la Guardia Civil de Chipiona, varios miembros de esta institución se introdujeron en el mar para desmontar este arte de pesca ilegal, ya que suponía un serio peligro para los usuarios de la playa. El presidente del grupo ecologista CANS, Rafael Ruiz López, ha destacado la importante labor de la Guardia Civil de Chipiona en este asunto, indicando que “esta problemática de la pesca con trasmallo en las proximidades de la costa es uno de las más acuciantes dificultades con las que se enfrentan día a días los conservacionistas, ya que tanto desde las embarcaciones, como a pie desde la costa, se están montando estas redes sin respetar las distancias mínimas permitidas”.
Desde la Asociación de Mariscadores a pie de Corral, Jarife, se ha subrayado su posicionamiento en contra de este uso de artes prohibidas que supone un riesgo para la seguridad de los bañistas. En la entidad también se felicitan por la implicación de la Guardia Civil en la vigilancia del litoral chipionero, animando a que ello continúe durante la temporada estival y se intensifiquen estas acciones para la conservación de los corrales de pesca, antiquísimo sistema de pesca que únicamente se conserva en la costa noroeste gaditana.
El delegado de Medio Ambiente, Javier Díaz Jurado, ha agradecido el compromiso de la Guardia Civil de Chipiona en este y en todos aquellos asuntos en los que se les ha solicitado colaboración desde la delegación, como es el control y vigilancia de la vía verde y la lucha contra la caza de aves insectívoras.
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