Sindicatos critican que el Consorcio Provincial no quiere implantar la segunda actividad, que permitiría desempeñar a los profesionales veteranos actividades más livianas y, a su vez, renovar una plantilla en la que no salen plazas desde 2010.
Sigue el tira y afloja entre el Consorcio Provincial de Bomberos de Cádiz y los sindicatos que representan a estos trabajadores a consecuencia de la falta, en estos momentos, de un seguro de vida e invalidez que cubra a estos profesionales. Como se recordará, desde el 1 de enero de 2017 los bomberos de la provincia así como sus familias están sin seguro, después de que el ente provincial y la aseguradora con la que tenían contratado el mismo no renovaran el contrato. Desde el Sindicato de Bomberos de Cádiz (SBC) señalan que el Consorcio rebajará la aportación en la próxima licitación del seguro, lo que obligará a rebajar también las coberturas que tienen los bomberos firmadas en su acuerdo regulador. Se da la circunstancia, además, que en el presente año 2017, a un bombero del Consorcio le han declarado una incapacidad, por lo que el Consorcio, al carecer de un seguro, tendrá que hacer frente a una indemnización a este trabajador como responsable subsidiario. "Nos tememos que es el motivo de querer quitar ahora la mitad de lo presupuestado anteriormente", señalan desde el SBC.
Desde este sindicato señalan que "no estamos dispuestos a que los bomberos de la provincia salgan perjudicados por una mala gestión del presidente". Así, desde octubre de 2016, momento en que la anterior compañía de seguros comunicó al Consorcio que no le interesaba seguir, "ya nos tendríamos que haber sentado a resolver este problema y no habríamos llegado a esta situación en la que nos encontramos. Seguimos en una situación excepcional al carecer de seguro de vida e invalidez y queremos que como mínimo el consorcio ponga encima de la mesa de negociación lo mismo que estaba presupuestado en la última licitación".
Otra de las propuestas que, señala el sindicato, se les niega en la mesa de negociación es la implantación de la segunda actividad a los bomberos. El SBC ha planteado esta medida para rebajar el índice de siniestralidad de jubilaciones por incapacidad y así ser rentables a las compañías de seguros y, por consiguiente, poder bajar las aportaciones a estas compañías. Al pasar a esta situación de segunda actividad, a los bomberos, en muchos casos, no se les tendría que declarar una incapacidad, puesto que podrían desarrollar otras labores como pasar al departamento de formación, prevención o atención al teléfono. "Nos tememos, y así se lo hemos hecho saber a los responsables del Consorcio en la mesa de negociación, que al bajarle las coberturas en los seguros a los bomberos y no tener segunda actividad, los bomberos seguirán en los parques, pero muchos de ellos mermados físicamente, y si a esto le sumamos el envejecimiento de la plantilla, puesto que prácticamente no se han creado plazas desde 2010, repercutirá negativamente en el servicio que le prestamos a los ciudadanos".
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