El área sanitaria de Jerez, que engloba a este y a los municipios de Sanlúcar, Rota, Chipiona y Trebujena, además de los núcleos rurales, apenas ha logrado dar 12 altas desde hace más de dos semanas. En concreto, si el 17 de abril había 49 curados (cuando ya habían transcurrido cinco semanas del inicio del estado de alarma), en los siguientes 17 días sólo se han registrado esa docena de curaciones totales.
Las razones pueden ser diversas. Principalmente, mientras en España y en el resto de Andalucía las curaciones son de alrededor del 50% frente al total de casos registrados, en Jerez empezó más tarde a extenderse el coronavirus que en Madrid y Cataluña, principales focos nacionales, o que en Málaga, la provincia donde la pandemia comenzó con más fuerza en Andalucía.
En la comunidad, los curados representan el 48% de los positivos arrastrados desde el inicio de la crisis sanitaria. Las muertes, el 9%. Los positivos no curados son el 42%, redondeando. En Jerez, los curados representan solo el 12% de los 362 positivos; con una mortalidad del 12% entre esos positivos (más alta por el foco de la residencia de ancianos de La Marquesa, por lo que Jerez suma 44 muertes), mientras que los positivos aún no curados son el 71%. Es decir, de los 362 positivos, 257 siguen aún sin tener el alta.
Las cifras, eso sí, no son malas en cuanto al número de positivos, con apenas un caso de entre 1.000. El total de España es cinco veces superior, con 5,28 casos por cada 1.000 habitantes. En ese sentido, el coronavirus ha llegado más tarde, o, se podría entender, el confinamiento ha llegado en una etapa muy anterior a la que llegó en otras zonas como Madrid o Cataluña. Por todo ello, la falta de curaciones parece estancada.
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