La Guardia Civil sigue actuando para tratar de cercar el narcotráfico y el petaqueo en la provincia de Cádiz, pero no es nada fácil. A veces, además, se exponen a lesiones. La pasada semana, un agente resultó herido en una persecución que transcurrió de madrugada por las marismas el Parque Natural Bahía de Cádiz.
Tras el avistamiento de una embarcación que se dedica al avituallamiento de narcolanchas y cargamentos más allá de la costa, que es lo que se conoce como petaqueo porque principalmente consiste en suministrar petacas de combustible, los agentes comenzaron a correr por la zona. Fue una furgoneta lo que vieron y empezaron a correr.
Pero de noche, en esta zona de marisma, resulta difícil porque aquí se impone la plena oscuridad, ya que dejaron atrás la zona conocida como Las Coquinas, un conjunto de viviendas que dan directamente al espacio natural. En esa carrera, uno de los agentes se clavó una gavilla, un hierro empleado al parecer en este caso para delimitar una de las marismas.
Para Tráfico "sí hay drones"
Según explica Agustín Domínguez, portavoz de Jucil en la provincia de Cádiz, el agente resultó herido en la cara interior del tobillo, "afectándole a una vena", por lo que comenzó a sangrar. Sin embargo, el herido es "un guardia civil de los duros", así que "solo ha tenido dos días de baja" porque además, a pesar de las heridas, no está impedido para caminar. Sin embargo, está claro que la suerte ha jugado un factor en este caso y que podría haber sido una lesión mucho mayor.
La principal reclamación en casos como este es que se incrementen los medios, dice Jucil. "Llevamos cuatro años pidiendo drones, que no son caros". Hay agentes, además, formados "hasta para dar clases, por la enorme cantidad de cursos que tienen". La realidad es que "sí hay drones para Tráfico, pero no para esto". Pero esos drones se pagan solos.
La zona del parque se ha convertido en epicentro de entrada y salida de narcos y de ayudantes de estos. Así, no sorprendía que este fin de semana amaneciera Sancti Petri llena de petacas, empujadas por la marea y los vientos.