La madrugada del 8 de agosto, tal como adelantó lavozdelsur.es, un joven natural de Jerez (F.A.) era ejecutado en un chalé de la zona del Pinar de los Franceses, en el camino de la Perdiz en Chiclana (Cádiz).
Aquella madrugada, como adelantó este medio, un grupo de al menos seis personas, ataviadas con chalecos que simulaban ser de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, irrumpió sobre las cinco de la mañana en la vivienda para acabar, a tiros, con la vida del hombre, de 33 años de edad, que se encontraba con su pareja y sus dos hijas. Hasta en dos ocasiones le dispararon a bocajarro, dejándole unas heridas incompatibles con la vida.
Tres meses de elaborada investigación
Tres meses después de los hechos, tras una ardua investigación, la Guardia Civil ha detenido a cinco personas por este asesinato tras, como apunta el Instituto Armado, un vuelco de drogas. Un día después del suceso fue localizado en Dos Hermanas el vehículo en el que habían huido algunos de los autores del asesinato. Un total de 15 registros domiciliarios se han llevado a cabo durante la investigación en Puerto Serrano (Cádiz) y en las localidades sevillanas de Guillena, Alcalá del Río, Carmona y Sevilla capital.
Hasta el momento, no se han ofrecido más datos sobre la operación llevada a cabo para resolver un asesinato que conmocionó a la provincia de Cádiz y que volvió a poner el foco en la escalada de violencia que vive la guerra por el control del narco en la zona del Estrecho.
La vivienda donde se produjo el crimen contaba con un sistema de cámaras de vigilancia. La Guardia Civil se llevó este material tras registrar la escena del crimen y se ha apoyado en las imágenes para desarrollar la investigación policial que ha acabado con la detención de cinco personas que tendrán que responder por esta muerte ante la justicia.
