El satélite se vio un 14% más grande y un 30% más brillante.
Hasta la pasada madrugada, la última vez que pudimos verla tan grande y brillante fue en noviembre de 2016, en un fenómeno denominado Superluna que ocurre durante la coincidencia de la luna llena o nueva con el máximo acercamiento de ésta a la tierra (el perigeo).
Si bien las superlunas se pueden ver a simple vista y no son necesarios telescopios para ello, el ojo humano no nota de forma destacada este fenómeno, si bien las superlunas parecen hasta un 14% más grandes y un 30% más brillantes que una luna llena habitual. Lo que sí es cierto es que en algunos lugares se verá más grande debido a la llamada ilusión lunar, una falsa apreciación de observar la luna mucho más grande cerca del horizonte.
A pesar del intenso frío, en la provincia el tiempo acompañó, por lo que todo aquel que quiso buscar un sitio destacado para observarla, o simplemente a pie de calle, pudo disfrutar y tomar fotografías de este fenómeno que ocurre en contadas ocasiones. Si bien en los próximos años podremos observar nuevas superlunas, la NASA predice que la mayor que veremos en las próximas décadas se producirá en 2034.
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