La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha visitado este jueves la provincia de Cádiz para estar en Rota y Jerez. No obstante, la líder de Sumar ha optado por no convocar a la prensa y no realizar declaraciones ante los medios de comunicación durante su viaje 'exprés'.
La vicepresidenta segunda del Ejecutivo ha acudido a Jerez para visitar el programa TándEM de formación y empleo de personas migrantes, que organizan el SEPE en colaboración con la Federación Sur Acoge. Antes, Díaz ha mantenido una reunión el Comité de Empresa de trabajadores de tierra de la Base Naval de Rota. A su paso por la calle Larga de Jerez, la ministra de Trabajo ha recibido algunos abucheos de personas sentadas en uno de los bares de dicha vía.
Las declaraciones contra el PSOE
Tras varios meses en segundo plano, Díaz ha vuelto al foco mediático por los escándalos en su socio de Gobierno. Las denuncias por posible acoso de algunos de sus miembros y las acusaciones por corrupción a varios dirigentes provocaron que la vicepresidenta elevara el tono hace algunos días para pedir cambios a Pedro Sánchez. Unas declaraciones que parecían un ultimátum, pero que se han suavizado en las últimas horas.
De hecho, la coordinadora general de Movimiento Sumar, Lara Hernández, ha aclarado que Díaz no planteaba una ruptura del Ejecutivo pese a que no se conforma con un "cambio de caras". "La vicepresidenta segunda del Gobierno no ha planteado en ningún caso una ruptura del Gobierno tal y como está apareciendo. Nosotros y nosotras lo que seguimos planteando y, creo que es importante recalcarlo, es una remodelación del Ejecutivo".
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha rebatido este jueves el argumento de su vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y de Sumar de que es necesaria una remodelación del Ejecutivo y cambios profundos para no alimentar a Vox, subrayando que es el PP el que contribuye al auge de la ultraderecha.
Sánchez, en declaraciones a los periodistas a su llegada a la última reunión del año del Consejo Europeo, se ha referido a esas exigencias de Sumar después de los casos de corrupción que han afectado a exdirigentes socialistas y de los de acoso sexual.