Una Vuelta a todo Jerez: lo que TVE no enfocará... afortunadamente

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La contrarreloj que abre la puerta a la ronda ciclista española 2014 es un inmejorable escaparate para Jerez, pero ¿qué hay de esa otra realidad que no se verá por televisión? El gobierno del PP, el mismo que dañó sobremanera con sus decisiones en el primer año y medio de legislatura la que llaman 'Marca Jerez' -con por ejemplo una huelga de basura salvaje que duró 21 días por falta de negociación-, se aferra ahora al efecto de un evento que ha entusiasmado a muchos jerezanos

El recorrido para la salida de la edición número 69 de la Vuelta Ciclista a España está impecable. Ha arrancado una contrarreloj que parte de la fuente del Mamelón y concluye en el González Hontoria. Las cámaras de TVE retransmiten el evento deportivo, la tercera ronda ciclista de mayor importancia a nivel mundial después del Tour de Francia y el Giro de Italia, y ofrecen un recorrido inmaculado por las calles de parte del centro y otras zonas periféricas de la ciudad. Pero, qué otro Jerez no saldrá por la tele bajo el escaparate realizado ex profeso, caso del decorado del Mamelón, para un evento que costará entre canon y organización unos 300.000 euros al Ayuntamiento.

Muchos jerezanos se han volcado con la prueba, incluidos algunos de los más de 33.000 que están desempleados y que tampoco arañarán beneficio alguno del desembarco por unos días de un pelotón ciclista que, al menos, proyectará una imagen positiva de la ciudad al exterior, aunque solo sean 12,6 kilómetros de un término municipal que ocupa una extensión de 1.188,14 kilómetros cuadrados (tercero más grande de España) y en el que viven 214.754 habitantes (quinta ciudad andaluza). El gobierno del PP, el mismo que por ejemplo permitió 21 días de huelga en la basura por falta de talante negociador y para bochorno de los jerezanos a escala nacional e internacional o que dio pie a una batalla campal a las puertas del Ayuntamiento, ahora pretende resarcirse del daño que ha causado en esta legislatura a la que ellos mismos quieren hacer llamar 'Marca Jerez'.

Un centro histórico que se cae a pedazos

Los ciclistas desfilarán a toda mecha por arterias principales de la ciudad, caso de Cristina, Larga, Corredera... y poco más. El verdadero centro histórico de Jerez, con siglos de historia en sus piedras, pasará desapercibido. Y afortunadamente, pues está que se cae literalmente. Enormes edificios apuntalados o con medidas de seguridad antiderrumbe y, sobre todo, un enorme solar donde se iba a ubicar la Ciudad del Flamenco, descartada por el PP tras romper con la financiación que ya había consignado año tras año el Ministerio de Cultura, que vive a medio camino entre la escombrera, el jardín de jaramagos y un incierto futuro que, según el gobierno local, pasa "provisionalmente" por un tablao y un parque en medio de la nada, pues de las primeras cosas que necesita esta zona de la ciudad es gente que la habite.

Oda al crack del ladrillo

Las obras del Palacio de Congresos de Jerez se paralizaron hace casi seis años, justo cuando el negocio del ladrillo descubrió de repente que sus pies eran de barro. El crack dejó en la ciudad algunas moles de escombros dignas de ser estudiadas, ésta de la que hablamos o cinco majestuosas grúas junto al Sherry Golf en lo que iba a ser un complejo hotelero de lujo. La Vuelta a España se volcará hacia el ala Este de la ciudad, obviando la antigua circunvalación que, a la altura del hospital, ofrece una visión fantasmagórica de los excesos de hace unos años, cuando la ciudad (como muchas otras en España) era el paraíso de la construcción desenfrenada.

¿Parques y jardines?

Más allá de que de vez en cuando se desprenden ramas de árboles, a veces con tan mala suerte que hieren a viandantes o jerezanos que simplemente toman algo en una terraza, lo de los parques y jardines en la ciudad es de auténtica pena. Esperemos que al realizador de TVE no le dé por pinchar a la altura del Jardín Escénico o, muy cerca del centro bordeando Ronda Muleros, al parque de la Hoyanca. Todo lo contrario a algo a lo que podamos llamar zona verde. No es extraño este pésimo estado de nuestros espacios libres, si se tiene en cuenta que en esta legislatura el gobierno local habrá recortado 1,5 millones de euros desde julio de 2012 en estos menesteres. Por supuesto, la empresa concesionaria adjudicada en ese momento es Elsan, del conglomerado del ex ministro franquista Villar Mir (OHL). Nadie pide responsabilidades.

¿Y las barriadas? Ay, las barriadas

Está el abandono que sufren las barriadas y luego está lo de Cerrofruto. Allí se han quedado los bloques a medio tirar y su aspecto sigue siendo más propio de Iraq en guerra que de una ciudad de un país desarrollado como España ¿o no? El caso es que pese a la narcotización del tejido vecinal, todavía son muchos los vecinos y vecinas que reclaman mejoras para sus barrios, mermados por la falta de limpieza y poda, la merma en la desinsectación y desratización, los problemas urbanísticos elementales como los ligados a la accesibilidad, entre otras muchas cosas. Las barriadas son las grandes perjudicadas por los recortes y privatizaciones en los servicios públicos y allí, no lo olviden, es donde vive el grueso de la población jerezana. Sí, esos que votan cada cuatro años.

Derribo de Cerrofruto, actualmente paralizado.

¿La Detroit española?

El hundimiento del sector industrial bodeguero a finales de los 80, sin que el Estado interviniera con un plan serio de reindustrialización, tiene mucha incidencia en el Jerez que se ha ido legando para la ciudadanía. Los sindicatos cifran entre 30.000 los empleos directos y de la industria auxiliar que se perdieron. Mucha arquitectura bodeguera, de altísimo valor, son hoy esqueletos inertes (antiguas bodegas calle Cristal, por ejemplo, o zona de San Mateo). Otros grandes ejemplos del patrimonio jerezano también permanecen abandonados a su suerte, como el Palacio de Riquelme o el Palacio de Villavicencio, donde iba a tener su sede el Museo de Lola Flores. Pero esta ciudad que a veces recuerda a la fantasmal Detroit, donde el derrumbe de la industria automovilística la convirtió en una localidad en estado de putrefacción, también acumula otra serie de solares y obras abandonadas tras el crash inmobiliario que afean su imagen y no invitan al optimismo. El control de realización de TVE tampoco centrará la imagen positiva que quiere trasladarse al exterior en estos enclaves... afortunadamente.