Los técnicos superiores sanitarios (TSS) han iniciado este jueves la primera de cuatro jornadas de huelga nacional convocadas por los sindicatos del sector. La movilización se produce, según los representantes profesionales, por el incumplimiento de los compromisos adquiridos por los Ministerios de Sanidad, Educación y Hacienda respecto a sus demandas, que consideran históricas y pendientes desde hace más de cuatro décadas. Los convocantes pretenden visibilizar la relevancia de su labor dentro del sistema público de salud y la necesidad de avanzar en su reconocimiento profesional.
El colectivo reclama el reconocimiento oficial de su condición como profesión sanitaria titulada y reglada, así como una retribución acorde con el grupo B del Estatuto Básico del Empleado Público, una categoría prevista desde 2007 pero no aplicada a estos trabajadores. Entre las peticiones figuran también la homologación de sus titulaciones con los estándares europeos y la creación de diplomas de acreditación avanzada. Las organizaciones sindicales sostienen que la situación actual genera desigualdades laborales y limita el desarrollo profesional de miles de técnicos que operan en hospitales y centros de diagnóstico.
La huelga de octubre se suma a la tensión acumulada tras los paros previstos en junio, que fueron desconvocados después de una reunión con el Ministerio de Sanidad. En aquel encuentro, el departamento se comprometió, según los sindicatos, a canalizar las reivindicaciones a través del Estatuto Marco del personal sanitario. Sin embargo, el borrador presentado por Sanidad solo contempla la clasificación del colectivo en el nivel 5 del Marco Español de Cualificaciones, una propuesta que las organizaciones consideran insuficiente.
Presión al Gobierno
Además de la huelga, los técnicos han convocado una manifestación para el lunes 3 de noviembre en Madrid. La marcha recorrerá las sedes de los Ministerios de Hacienda, Educación y Sanidad, con el objetivo de trasladar directamente su malestar a los responsables de los tres departamentos implicados. Los sindicatos esperan que la movilización sirva para presionar al Gobierno y desbloquear las negociaciones en torno a sus demandas.
Desde el Ministerio de Sanidad, la titular del departamento, Mónica García, ha afirmado que su equipo trabaja en la mejora de las condiciones de estos profesionales y reconoce su papel esencial dentro del Sistema Nacional de Salud. La ministra ha señalado que parte de las reivindicaciones ya han recibido respuesta o están en proceso de ser atendidas, aunque ha precisado que algunas dependen de otros ministerios, especialmente las vinculadas con la formación y la estructura educativa de las titulaciones.



