Jerez es una ciudad de artistas. No solo porque nacen y aquí se crían, sino porque también es casi como un hogar para el arte de fuera.
Por eso, no extraña ver por la ciudad a artistas como Kiko Veneno o Muchachito por las calles de la ciudad. Junto al Canijo de Jerez, Tomasito y Diego Ratón, forman G-5, un grupo musical que se formó tiempo atrás con canciones tan fiesteras como La freiduría, que en realidad es El vino y el pescao. Era un grupo fantasma, porque estaban y no estaban, todo a la vez.
Hace 15 años, grababan un disco juntos, Tucaratupapi, pero fue efímero. Hace un año, volvieron a reunirse en un homenaje a Camarón en San Fernando. Y desde entonces han empezado a sacar adelante el proyecto.
@ferminmetralla el canijo de Jerez en directo desde el ático del Gallo Azul
♬ sonido original - METRALLA!!!
Entre esas nuevas canciones está Badajoz, con un gran tono humorístico, al estilo de lo que ya venían haciendo en ese tono donde tan bien convive lo garrapatero que aportan los dos componentes delinqüentes.
Recientemente, han sido vistos los cinco miembros en la azotea del Gallo Azul, un emblemático edificio de Jerez situado en la calle Larga. Vestidos de presos, desplegando compás, se dejaron ver.
En una calle que no solo es la central y casi que más importante de Jerez, sino que tiene hasta cierto simbolismo. Porque en esta calle transcurría el videoclip de A la luz del lorenzo, primer gran éxito de Los Delinqüentes, donde unos jovencísimos Canijo y Ratón, junto al añorado Migue Benítez, paseaban con sus guitarras rumbeando. Detalles históricos como el autobús rosa del inicio.
Quién sabe si la canción que traen con este disco deja tan buenos ratos y recuerdos para la historia de la ciudad como fue aquella canción. Difícil, uno diría que imposible de superar. Pero eso de ver el Gallo Azul en un videoclip no está nada mal.