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Ocurrió en 2003, 2007 y 2011 y ha vuelto a pasar ahora. No falla. Es acercarse las elecciones municipales y que se hable en Jerez de la independencia de la antigua pedanía de La Barca. En ocasiones en política, ya se sabe, todo vale. En el pleno ordinario de septiembre, celebrado el pasado viernes, el Ayuntamiento de Jerez aprobaba con los votos de PP y de IU (PSOE y Foro se abstuvieron) reiterar la voluntad ya expresada por el Consistorio de iniciar el procedimiento de segregación de las Entidades Locales Autónomas de La Barca y de Torrecera, conforme a lo previsto en la Ley de Autonomía Local de Andalucía (Laula).

La concejala de Medio Rural, Susana Sánchez-Toro, recordó que el pleno ya aprobó en septiembre de 2013 y en diciembre de 2013 “tomar conocimiento de los acuerdos de las juntas vecinales de ambas pedanías así como dar inicio a las actuaciones necesarias para su segregación”. La última palabra, en todo caso, la tendrá el Gobierno andaluz, que ya en diciembre de 2007 expresó oficialmente su rechazo a la independencia de La Barca. Una larga reivindicación que emprendió el histórico alcalde socialista Roque Valenzuela, tras tomar el testigo del también socialista Juan García. Éste logró en 1995 que San José del Valle se separara de Jerez, dejando de este modo de ser el municipio más grande de Andalucía.

Volviendo al pleno del pasado viernes, no deja de ser curioso que fuese la propia alcaldesa, María José García-Pelayo, quien aludiese a que “las dos pedanías han tomado una decisión política que conlleva una tramitación jurídica muy compleja, que requiere su tiempo para hacerlo acorde a la legislación vigente. Pero nos tienen que reconocer que por primera vez se ha dado respuesta a este sentimiento”. En su anterior etapa en la Alcaldía (2003-2004), como ella misma admitía en la precampaña de las municipales de 2007, "me mostré en contra de este proceso porque iba en contra de la integridad del territorio de Jerez". Una postura que, una década después, la regidora popular y senadora parece haber reconsiderado.

Según la nota de prensa remitida por el Ayuntamiento, "el gobierno municipal ha mostrado su voluntad de atender a la petición de estas dos entidades con el máximo respeto hacia sus ciudadanos. El expediente de segregación se lleva trabajando un año de la mano de los alcaldes pedáneos y con los responsables de la Junta de Andalucía y no está terminado porque es muy complejo y son las propias ELAs las que lo están terminando de elaborar con una consultoría y una comisión técnica que se ha constituido en el Ayuntamiento. Ahora lo que traemos es que se continúe la tramitación de este expediente solicitándolo de oficio el Ayuntamiento".

Si la reforma de la administración local que puso en marcha el Ejecutivo de Rajoy, y que entró en vigor el pasado 31 de diciembre, busca precisamente reducir el número de pequeños municipios en todo el país, el PP desde Jerez estaría espoleando la maniobra contraria para tratar de salvar la cara ante sus vecinos-votantes. Aquí no puede olvidarse que La Barca está actualmente gobernada por el popular Alejandro López, mientras que Torrecera está en manos del independiente Manuel Bertolet. "El Gobierno municipal no ha pagado toda la deuda pero sí bastante más de lo que el gobierno socialista pagaba a las ELAs”, apuntaba en ese mismo pleno Sánchez Toro para sacudirse las críticas del abandono que, según sus representantes, sufre el mundo rural. Solo con las antiguas pedanías se mantiene una deuda en transferencias de más de 7 millones de euros. 

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