La declaración de Pacheco en la primera sesión del juicio por el caso Huertos de Ocio dejó claro, una vez más, que el histórico político andalucista y exalcalde de Jerez no pasa nunca desapercibido. Genio y figura, como suele decirse, dejó varias perlas en forma de declaraciones y anécdotas que merecen ser destacadas.
Una llegada a la Audiencia muy diferente
Desde luego, se le vio mucho más animado que la última vez que pisó la sede jerezana de la Audiencia Provincial de Cádiz. Desde luego, hay mucha diferencia entre hacerlo bajando esposado de un camión de la Guardia Civil a hacerlo por su propio pie, desde su cercana casa de la calle Fermín Aranda. A su llegada no quiso hacer declaraciones a los medios que lo esperaban y bromeó ante la presencia de las cámaras: “Hoy no me he maquillado”.
La botella de agua, su fiel compañera
Chaqueta color mostaza, camisa gris marengo, pantalones vaqueros, náuticos de color marrón… y una botella de agua de litro y medio. Las últimas veces que llegó a la Audiencia también la traía consigo, si bien le servía más que nada para intentar ocultar sus esposas. En la jornada de este martes le dio buen uso, ya fuera sentado en el banquillo como declarando ante el fiscal y los letrados, algo que no fue de extrañar puesto que prácticamente habló de corrido durante más de una hora.
Un martillo pilón para el fiscal
Hubo momentos en que no se le vio cómodo al fiscal Rafael Payá durante su interrogatorio a Pacheco. Se enfrascó una y otra vez en preguntarle por su presunta intervención en el convenio de permuta —hasta el punto de que el presidente del tribunal le señaló que la pregunta ya había sido debidamente respuesta— y el exalcalde y expresidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo mostró sus dotes de orador y sus grandes conocimientos sobre el funcionamiento del Ayuntamiento y de la GMU para hacerle ver que él confiaba plenamente en el trabajo de los técnicos, que su función nunca ha sido administrativa, sino política, y que debido a su gran carga de trabajo no podía leer de cabo a rabo cada documento que llegaba a sus manos, por lo que firmaba confiado de que todo era legal.
Del recuerdo de tiempos pasados…
Para muchos, Pacheco fue el hombre que transformó Jerez de pueblo a ciudad, quien la hizo internacional gracias al Circuito, el gran reformador de la Feria del Caballo y quien insistió en que la artería principal del centro, la calle Larga, debía de ser peatonal para realzarla. Sus más de veinte años en la Alcaldía hace que alguno le siga llamando alcalde, por eso ha reconocido más de una vez que siente los problemas de Jerez como el que más. Así, durante esta primera sesión del juicio no dejó pasar la oportunidad de resaltar su legado, como esa transformación urbana de la ciudad, a la vez que afirmó que “fue desaparecer Pacheco y paralizarse toda la ciudad. Jerez aún lo está pagando”.
… a hablar en presente
Sería precisamente por ese hecho de sentirse una especie de alcalde perpetuo, que en alguna ocasión habló en presente, corrigiéndose enseguida. Lo hizo, por ejemplo, al hablar de la revitalización que quería hacer la GMU de la zona Oeste de la ciudad, que afirmó que en 2003 estaba un poco “degradada”. Entre los proyectos que recordó y se quedaron en el limbo, el de la recuperación de los suelos de la fábrica de botellas para urbanizar toda esa zona: “La compra de los suelos excede la capacidad del Ayuntamiento, bueno, excedía…”.
Apoyo de sus incondicionales
El exalcalde siempre ha solido estar arropado en el juzgado por simpatizantes y amigos, que no dudan en acudir como público aun teniendo que soportar largas horas de declaraciones. Una de estas personas que se vio en la Audiencia fue el histórico dirigente vecinal Paco Flores, expresidente de la asociación de vecinos de La Constancia, que en más de una ocasión ha declarado abiertamente sus simpatías hacia el alcalde y quien criticó su larga estancia en prisión cuando Pacheco aún no disfrutaba de permisos penitenciarios.
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