La Hermandad de la Humildad y Paciencia de Jerez ha cerrado un acuerdo con la Hermandad de María Santísima de los Dolores de Carmona (Sevilla) para la cesión de su paso de palio. Esta colaboración permitirá que María Santísima de la Trinidad y San Juan Evangelista vayas bajo palio en la salida procesional extraordinaria prevista para el próximo 4 de octubre de 2025, con motivo del 25º aniversario de la erección canónica de la corporación jerezana.
Un gesto de “auténtica fraternidad y generosidad” por parte de la comunidad servita de Carmona, que ha respondido de forma inmediata a la solicitud de los cofrades jerezanos, haciendo realidad “uno de los grandes sueños de nuestros hermanos: ver a nuestra titular mariana bajo palio”, afirma en un comunicado emitido por la hermandad.
Solución técnica para hacer realidad “un sueño”
La sede canónica de la hermandad jerezana presenta limitaciones estructurales que dificultaban históricamente cualquier salida procesional en paso de palio. Sin embargo, el esfuerzo conjunto entre la junta de gobierno de la cofradía de Jerez y el prior y Consejo de Gobierno de la Orden Seglar de los Siervos de la Virgen Dolorosa de Carmona ha permitido adaptar el proyecto sin renunciar a este deseo de la hermandad jerezana.
En la nota informativa expresa su “más sincero y profundo agradecimiento” a la hermandad carmonense, no solo por la cesión material, sino por el “espíritu de fraternidad, comprensión y entrega” con el que se ha llevado a cabo todo el proceso. “Este acto trasciende lo puramente logístico: es una muestra palpable de la comunión entre las hermandades y del amor compartido a la Santísima Virgen”, han subrayado.
Por ello, animan a hermanos, devotos y a todo el pueblo de Jerez a vivir con emoción esta jornada que marcará un momento estacado en la historia de la corporación. Será, aseguran, “una jornada inolvidable para todos los que aman la devoción trinitaria”.
Un palio inspirado en modelos antiguos
El paso de palio de la Hermandad de María Santísima de los Dolores, también conocida como los Servitas de Carmona, es conocido por su diseño inspirado en modelos antiguos y su estética decimonónica. La hermandad buscó innovar con un palio que recuperara la tradición, alejándose de las tendencias predominantes.
El diseño del palio se remonta a los antiguos templetes/palios tradicionales de Carmona anteriores al siglo XX, incluyendo el que poseía la Orden Servita en la localidad, obra de Solís (1871). Se caracteriza por su gusto por el siglo XIX, con un gran baquetón que actúa como una cornisa invertida para sostener las bambalinas. Están confeccionadas en terciopelo burdeos y adornadas con elementos manieristas en metal plateado y pasamanería del mismo color y está sostenido por ocho varales.