Jesús Caro, hermano mayor de la Hermandad de la Paz, ha mostrado su profundo malestar tras conocerse la resolución del Obispado sobre el controvertido Lunes Santo. “Me siento dolido, frustrado, solo y triste”, confesó a lavozdelsur.es tras recibir la noticia, que ha generado “una gran desazón” entre los miembros de la cofradía. Caro asegura que no esperaba un desenlace así y reprocha que “si se ha amonestado al presidente, este debe responder por los daños causados”.
El Obispado, que hizo pública la resolución mediante un comunicado, ha impuesto una única amonestación al presidente, algo que ha sorprendido en La Paz. “No quiero que se haga sangre de lo sucedido, pero que el resto quede impune no, cuando nos hemos visto muy afectados en nuestro patrimonio”, señaló Caro, recordando la dureza del episodio vivido durante la estación de penitencia.
“Se nos quedó cara de tonto”
La noticia cayó como “un jarro de agua fría”, en palabras del propio hermano mayor, que confesó que la hermandad recibió la comunicación después de que lo hicieran otros hermanos mayores y los medios de comunicación. “Esto es de traca”, lamentó. También cuestionó que, mientras el obispo se reunió con el presidente y el hermano mayor de La Cena, La Paz no fue escuchada en ningún momento.
Uno de los puntos más sensibles tiene que ver con los daños materiales sufridos por la cofradía a causa de la lluvia. “Si el presidente ha sido amonestado, que se haga cargo de los gastos de reparar los daños”, reclamó. La hermandad ya ha abonado 4.000 euros tras consultar con los artesanos que trabajaron en los pasos, que ese día estrenaban bordados y dorado. Una cantidad que, según Caro, correspondería asumir a los responsables.
La falta de una respuesta clara ha generado un notable descontento también entre los hermanos de la corporación. “No paran de decirme que la resolución no es normal, que no se hace justicia”, afirma el hermano mayor, quien ha solicitado una reunión con el obispo para expresar su malestar. “No vale que nos advierta a evitar confrontaciones cuando se deja de lado a la parte más perjudicada”.
“La Paz ha guardado respetuosamente silencio”
Jesús Caro ha querido dejar claro que entre las hermandades de La Cena y La Paz no ha habido conflictos directos. “No hemos confrontado con nadie. Entre las dos hermandades no ha habido nada de eso. Cuestión aparte ha sido el mundo cofrade”. También ha defendido el comportamiento ejemplar de su corporación, que hasta ahora ha mantenido silencio “por respeto al Obispado y confiando en su resolución”.
El hermano mayor insiste en que la gestión de la comunicación por parte de la diócesis ha sido deficiente. “El obispo tenía que haberme llamado, como hizo con el de La Cena y el presidente, antes de enviar el escrito. Así hubiera tenido la oportunidad de expresarle mi parecer”, reclama. Considera que esa falta de diálogo ha incrementado la sensación de injusticia.
La Paz, según Caro, se siente abandonada en un proceso que ha dejado cicatrices no solo económicas, sino también emocionales. “Me siento dolido, frustrado, solo y triste con la resolución del Obispado”, concluye, lanzando un mensaje de decepción que resuena en toda su hermandad.
