Exalumno de la Escuela de Arte, este jerezano se aventuró en 2009 a desarrollar una espectacular técnica artística basada en arena que ahora le lleva a programas de televisión, espectáculos, eventos y galas.
De la albañilería a dibujar en directo, en El Hormiguero, una caricatura de Ed Harris ante la atenta mirada del propio actor estadounidense. Felipe Mejías Rosado, jerezano de 39 años, ha hecho de la arena su forma de vida. Este antiguo alumno de la Escuela de Arte se ha convertido en uno de los pocos artistas españoles dedicados profesionalmente al sand art o arte de arena.
Año 2009. En plena crisis, y tras desempeñar trabajos de albañilería, carpintería o pintando coches, decide replantearse su vida desde el plano artístico. Internet le descubre una técnica original y visualmente espectacular: la narración de pequeñas historias a través de dibujos usando arena sobre una superficie iluminada que se proyecta para que el público pueda ver su trabajo a través de una pantalla.
Felipe no se lo piensa. Dispuesto por fin a desarrollar su labor creativa y quitarse esa espina que tenía clavada de no haber podido vivir de la ilustración, coge su coche, se planta en la la playa y llena una bolsa con arena. De vuelta a Jerez fabrica una mesa de metacrilato a la que incorpora una luz interior y una cámara cenital que pueda filmar y proyectar su trabajo. El joven aprende de manera autodidacta y pronto se lanza a la calle para ofrecer sus primeros espectáculos en Cádiz y Chipiona. El público se enamora de su show y Felipe, viendo el potencial, empieza a moverse por internet para venderlo a empresas de cara a potenciar sus eventos corporativos, eso sí, sin demasiada fortuna.
Pero Felipe no se desanima. En televisión anuncian los casting para un nuevo talent show, Tú sí que vales. No solo pasa las pruebas de selección previas, sino que va superando rondas del concurso hasta plantarse en la final. “Se me abrieron totalmente las puertas gracias al programa. Y a partir de ahí, fue bajarme del avión en Jerez y empezar a recibir llamadas de trabajo”.
Felipe reconoce que, a pesar de haber aprendido de manera autodidacta, su paso por la Escuela de Arte fue fundamental. “En principio hay que tener una base de dibujo, nociones del espacio, de volúmenes, y ya cuando te encuentras con la técnica ves que hay otras formas diferentes de trabajar”. La técnica en sí no le resultó complicada, ya que la práctica le iba dando cada vez más soltura, sin embargo sí encontró más dificultades a la hora de crear las transiciones y las historias. “Lo que hago normalmente son trabajos corporativos y duran de 10 a 15 minutos. Es poco tiempo para hacer que una historia se entienda bien”.
Actualmente, Felipe es requerido periódicamente en todo tipo de eventos, programas de televisión y espectáculos. Sus últimos y más destacados trabajos se han desarrollado estas últimas semanas. A finales de 2016, en la ceremonia de presentación del mejor coche del año y hace apenas unos días, en la gala de los Premios Forqué de cine, donde sus dibujos en arena que daban forma a algunas de las películas españolas más destacadas de la historia se acompañaban de imitaciones del polifacético Carlos Latre. Su éxito es tal que a nivel internacional también es requerido y, de hecho, su presencia se ha hecho habitual en un conocido programa de la televisión francesa.
Ahora, Felipe echa la vista atrás y recuerda sus veranos de infancia y adolescencia en las playas de la provincia. “Quién me iba a decir que acabaría viviendo de esa arena. Desde luego nunca me lo habría imaginado”.
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