Un foro para hablar del filón turístico de la Navidad sin estridencias. De la importancia de las fiestas navideñas para desestacionalizar un turismo tan vinculado a sol y playa en la provincia de Cádiz. En el que tengan cabida instituciones públicas, pero también representantes del sector turístico, hotelero y hostelero. Con esta intención se celebra el foro titulado Provincia de Cádiz: la Zambomba, la Navidad y un destino turístico todo el año, organizado por lavozdelsur.es en el coworking Cultura y Empresa Cámara, de la Cámara de Comercio de Jerez.
Participan el teniente de alcaldesa de Turismo de Jerez, Antonio Real, Vanesa Beltrán, diputada de Cultura de la Diputación de Cádiz, Beatriz Morón, delegada del Ayuntamiento de Arcos de la Frontera, y Antonio de María, presidente de Horeca, en una primera mesa de debate. Y Alfredo Carrasco, presidente de Hostelería Jerez, Antonio Mariscal, presidente del Clúster Turístico Destino Jerez, Josefa Díaz, directora del Hotel Las Cortes y Almudena Moreno, directora del Hotel Casa Palacio María Luisa, en una segunda mesa.
El objetivo pasa por transformar una tradición local en una experiencia turística sostenible y afianzar la Zambomba como marca cultural de Jerez, Arcos, y de toda la provincia de Cádiz. Y ayudar así a ensanchar el calendario turístico a nivel provincial.

Con estas bases se sientan a debatir los ponentes mencionados, moderados por el periodista y gestor cultural David Montes. "El mantenimiento de la tradición es fundamental", dice Antonio Real, teniente de alcaldesa de Turismo, Proyección Turística y Gestión Medioambiental del Ayuntamiento de Jerez, sobre la importancia de la Zambomba como ejemplo de eventos que contribuyen a desestacionalizar el turismo.
Real es partidario de potenciar el "efecto desestacionalizador", apoyándose en la Zambomba, algo que es "fundamental a la hora de vender turísticamente nuestra provincia". Pero dejando claro que el Ayuntamiento no quiere que "la Zambomba sea una pieza aparte de nuestra Navidad, sino que esté integrada", ya que la programación navideña en la ciudad "tiene otras muchas actividades que de por sí atraen visitantes".

El teniente de alcaldesa destaca que "Jerez no cierra ningún hotel en invierno por el empuje de la Navidad", de ahí que destaque que "el efecto de estacionalidad está cambiando", y apueste por "aprovecharlo". Y no es proclive a implantar medidas como la tasa turística: "El mejor cliente nacional que tiene Jerez es el andaluz, ¿le vamos a poner una tasa al señor que viene de Sevilla o de Málaga?".
"Todos somos responsables de que la esencia perdure en el tiempo", sostiene Vanesa Beltrán, diputada de Cultura de la Diputación de Cádiz, y también alcaldesa de Prado del Rey, a quien le llamó la atención un dato que vio en medios de comunicación este puente: que Jerez estaba entre los destinos andaluces preferidos, junto a Sevilla y Málaga. "La provincia está de moda, proyectamos una imagen bastante positiva", defiende Beltrán
La delegada de Arcos de la Frontera, Beatriz Morón, una localidad donde la Zambomba está declarada como Bien de Interés Cultural (BIC), al igual que en Jerez, defiende que "es nuestra seña de identidad". De ahí que anime a cuidarla, "a seguir defendiéndola".

"Hay que hacer una buena combinación entre la fiesta tradicional y la fiesta más popular", incide Morón, quien considera que es fundamental que durante la celebración de estas fiestas "haya una buena coordinación con los dispositivos de seguridad y limpieza".
"La Zambomba es más importante que la feria a nivel hostelero y turístico", apunta Antonio de María, presidente de Horeca, la patronal hostelera en la provincia de Cádiz. Sostiene que "la cultura forma parte del alma de los pueblos", y que en este caso con las celebraciones organizadas en torno a la Navidad, "garantizamos la sostenibilidad del futuro", por lo que anima a "no verlo como algo negativo".
Para De María, "la provincia es un mosaico romano, cada pueblo tiene su color y todos forman un conjunto". E insiste en esa riqueza cuando habla de las quejas que provocan celebraciones como las asociadas a la Navidad. "¿Quieres cavar una mina sin romper piedras? Todo tiene pros y contras, pero ¿cuántos pueblos firmaban y decían que para ellos las Zambombas tal como están?", se pregunta.

"Tenemos un gran producto turístico que hay que cuidar"
En la segunda mesa del foro, debaten Alfredo Carrasco, Antonio Mariscal, Josefa Díaz y Almudena Moreno. "La Zambomba tiene dos caras, una más íntima y otra ligada a los espacios públicos, que son muchas menos de las que se hacen en el ámbito privado", reseña Antonio Mariscal, presidente del Clúster Turístico Destino Jerez.

Para Mariscal, "el carácter de la Zambomba es íntimo por naturaleza", y cree que "la Zambomba en la calle es impostada. En el espacio privado está sana y en el público nuestra Zambomba se ahoga". De ahí que anime a "preguntarnos qué queremos". Y a cuidar la imagen que se proyecta, porque "el éxito de la Zambomba en Jerez va unido a las redes sociales", pero a veces se difunden imágenes que no se corresponden con lo que debería ser.
La directora del Hotel Casa Palacio María Luisa, Almudena Moreno, es de las que piensa que "tenemos un gran producto turístico", como es la Zambomba, que anima a "cuidar mucho". "Como no lo cuidemos vamos a matar a gallinas de huevos de oro", insiste, por eso cree que "hay que ver cómo podemos encauzarlo". Para Moreno, esta es "una fiesta muy bonita", que se vende muy bien a través de redes sociales, mayoritariamente. "Lo que no nos gusta desgraciadamente existe, pero hay que luchar para que deje de existir", incide.
El presidente de Hostelería Jerez, Alfredo Carrasco, defiende que existan Zambombas más comerciales, pero "siempre con un equilibrio". "Los primeros fines de semana, las Zambombas son muy nuestras", dice, luego se reciben muchos visitantes, sobre todo durante el puente de diciembre. "Apoyamos que pueda haber plazas y calles con Zambombas, pero con equilibrio", insiste.
La directora del Hotel Las Cortes de Cádiz, Josefa Díaz, anima a "trabajar la educación" a la hora de recibir turistas. "Tenemos que trabajar la marca y la excelencia", asegura. Y anima a "quitarnos de la cabeza la turismofobia, porque el turista no es un ente, somos las personas las que nos movemos".




